Lagomarsino: “Me dijo que el arma era para llevar en la guantera, que no la iba a usar”

El técnico informático que trabajaba con el fiscal Alberto Nisman y le prestó el arma calibre 22 que apareció junto a su cuerpo, rompió el silencio. “Nisman ya no confiaba en su custodia”, sostuvo.

Conferencia-Diego-Lagomarsino-Lucia-Merle_CLAIMA20150128_0131_28Diego Lagomarsino, el único imputado hasta el momento en la causa que investiga la muerte del fiscal Alberto Nisman, rompió el silencio. “Me dijo que el arma era para llevar en la guantera por si un loquito viene con un palo y me dice traidor hijo de puta”, manifestó el ingeniero informático que trabajaba en la Fiscalía Especial de la AMIA, junto al funcionario del Ministerio Público Fiscal.
“Ya no confío ni siquiera en la custodia”, relató que le dijo Nisman al pedirle un arma. Lagormarsino fue imputado ayer por la fiscal Viviana Fein por haberle prestado a Nisman el arma Bersa calibre 22 que fue encontraba junto a su cuerpo sin vida, en el baño de su departamento del piso 13 de la torre Le Parc de Puerto Madero.
El ingeniero infomático realizó una descripción pormenorizada de sus últimas horas con su “jefe”, como lo mencionó. Dijo que Nisman lo llamó a las 16.25 para decirle que fuera a su departamento, que arribó allí veinte minutos después, que cuando ingresó al departamento, la mesa del living estaba llena de papeles y resaltadores. “Tengo más miedo de tener razón que de no tener razón“, cuenta que le dijo cuando intercambiaron pareceres sobre la denuncia de encubrimiento contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
“Me dice ‘¿Tenés un arma?’. Me dejó totalmente mal parado, no entendía nada, porque imaginense que están con una persona que es su jefe y les pregunta eso. No podía creer que me estuviera preguntando eso. Lamentablemente le dije que sí. Y para qué la queres. ‘Tengo miedo por las chicas’, me dijo. ‘Pero vos tenés seguridad’, respondí. ‘Pero ya no confío ni siquiera en la custodia’“, desarrolló Lagomarsino.
El empleado de la fiscalía siguió con su relato. “En ese momento se quiebra y me dice ‘Vos sabes qué es que tus hijas no quieran estar con vos por miedo a que les pase algo’. Yo soy padre y lo más importante son los hijos. Le dije ‘es vieja’. Me dijo ‘es para llevar en una guantera por si viene un loquito con un palo y me dice traidor hijo de puta’. Era un arma vieja que fallaba”.
“No te preocupes que no la voy a usar”, afirmó que le dijo Nisman cuando le dio el arma.
Lagomarsino regresó a su casa, buscó las partes del arma, las metió en su mochila y volvio a Puerto Madero. “Cuando ingreso al edificio veo a uno de los vehículos de la custodia. Veo a uno de ellos que va a tomar el ascensor y acelero mi marcha para alcanzarlo. Subí con él”, dijo y reconstruyó el diálogo con mantuvo en el ascensor.
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Al llegar a la puerta, contó que Nisman le dio un sobre de papel madera a su custodio que partió enseguida. Al ingresar al departamento, Lagomarsino le pidió un café. “Agarrá una cápsula y peprarálo vos”, le contestó el fiscal.
Tomó el café, sacó las partes del arma de su mochila, y le transmitió las normas de seguridad de la bersa 22. “No te preocupes que no la voy a usar”, afirmó que le dijo Nisman.
“De ningún modo tengo sospecha alguna de que haya estado en el lugar del hecho en el momento en el que se produjo la muerte”, dijo la fiscal Fein sobre Lagomarsino.
“Me dijo que saliera por en frente y me fuí. Me dijo que nos veíamos después del lunes, pero yo el domingo a las 11 le mandé un mensaje, nunca me lo contestó”, recordó Lagomarsino.
Objetivo K. La estrategia del Gobierno, plasmada en la cadena nacional de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, fue apuntar contra Lagomarsino. Fue la “última persona que lo vio con vida, que habló con él y que además era de su íntima confianza, de su íntima amistad y que concurría, según hemos podido saber, asiduamente a su departamento. El que le da su arma, su propia arma 22, que está registrada como tal en el RENAR”, dijo desde Olivo en un mensaje grabado.
Cristina, además, lo calificó como un “feroz” opositor a su Gobierno. “Esta persona es un feroz opositor al gobierno, pudimos ver en su Twitter las groserías, esos insultos dirigidos a la persona de la Presidenta de la República, que no voy a reproducir”, lanzó.
“No sé si tengo fiebre por la gripe o por los comerciales del gobierno en TV pública”, fue uno de sus mensajes. “Este gobierno es un circo, por eso los espectáculos de ese tipo … @PPT_oficial”, fue otro. “#FelizCumpleCFK Que Dios le de mucha luz para ayudarnos a todos”, otro de los que más enojó a la Presidenta.
El secretario General de la Presidencia, Aníbal Fernández, fue tajante esta mañana. “Lagomarsino hacía inteligencia en las marchas por Cromañón”, dijo el funcionario K.
Hoy la version oficial del Gobierno sufrió un duro revés cuando la fiscal Viviana Fein desligó a Lagomarsino de la muerte de Nisman. “Solamente está imputado por haberle prestado el arma a Nisman, que es un delito que contempla penas de 1 a 6 años de prisión, pero de ningún modo tengo sospecha alguna de que haya estado en el lugar del hecho en el momento en el que se produjo la muerte”, aseguró.