Google limitará el alcance de los anuncios políticos

El gigante de la red ha anunciado esta nueva medida como parte de su nueva política de anuncios en campañas electorales, que tendrá efecto inmediato en el Reino Unido y se aplicará en el resto de Europa antes de que acabe el año.

Los partidos políticos ya no podrán lanzar anuncios en Google segmentados por sexo, edad o localización aproximada de los usuarios. El gigante de la red ha anunciado esta nueva medida como parte de su nueva política de anuncios en campañas electorales, que tendrá efecto inmediato en el Reino Unido y se aplicará en el resto de Europa antes de que acabe el año.

Google ya tenía límites al nivel de precisión que era posible seleccionar a la hora de crear este tipo de anuncios pero las nuevas medidas restringen aún más el conocido como microtargeting, la posibilidad de diseñar campañas muy efectivas seleccionando un público muy concreto. “Dada la reciente preocupación, el debate generado en torno a la publicidad política y la importancia de la confianza en el proceso democrático, queremos mejorar la confianza de los votantes sobre los anuncios políticos que pueden ver en nuestras plataformas publicitarias”, explica la compañía.

Uno de los secretos del éxito comercial de Google está en el increíble nivel de detalle que los anunciantes pueden alcanzar usando sus herramientas publicitarias. Google sabe mucho de nosotros y usa esa información para crear perfiles muy detallados que los anunciantes pueden seleccionar para garantizar el máximo retorno de inversión de sus campañas.

Este nivel de granularidad, sin embargo, ha empezado a preocupar a muchos analistas políticos porque consideran que facilita la rápida diseminación de mensajes propagandísticos que a menudo carecen de base, pero que resultan muy efectivo en ciertos segmentos de población.

Varias plataformas en la red están, en consecuencia, tomando medidas para limitar los efectos de estas campañas. Twitter, por ejemplo, anunció a finales del mes de octubre que prohibiría todo tipo de anuncios políticos en campaña. La red social TikTok también lo ha hecho. Snapchat los permite, pero también con algunas limitaciones y verificando la información presente en ellos.

La suma de Google a esta tendencia aumenta la presión sobre la única empresa que por ahora se ha negado a tomar una posición en este debate: Facebook. La red social ha admitido que no verifica las afirmaciones que hacen los candidatos en sus anuncios electorales, una decisión que ha cosechado críticas tanto fuera como dentro de la propia empresa y que es especialmente significativa dado el alcance de la plataforma.

Rumores de un posible cambio de estrategia o al menos de la inclusión de ciertas herramientas de control han disparado las alarmas de algunos equipos de comunicación. La organización de la campaña para reelegir a Trump en EEUU en las próximas elecciones de 2020, por ejemplo, ha alertado a sus simpatizantes de que un cambio en la política de Facebook afectaría negativamente a la campaña. “Esto dañaría de manera especial a las voces más pequeñas y los problemas que el público no conoce o las noticias NO están cubriendo”, denuncia Gary Coby, responsable digital de la campaña de Trump para 2020.