Algunos legisladores republicanos están convencidos de que la guerra de precios del crudo está dirigida principalmente contra las empresas de EE.UU. que producen petróleo de esquisto bituminoso.
Tras las conversaciones con el embajador saudita en EE.UU., un grupo de senadores estadounidenses instó al presidente Donald Trump a presionar a Riad y Moscú con un embargo petrolero, informa Reuters.
Los precios del crudo cayeron este 18 de marzo a mínimos de 18 años a medida que gobiernos de todo el mundo luchan para contrarrestar la pandemia de coronavirus que está causando el colapso de la demanda mundial de combustible.
Algunos legisladores republicanos están convencidos de que la guerra de precios del crudo desatada por ambos países tras el fracaso del acuerdo OPEP+ está dirigida principalmente contra las empresas estadounidenses que producen petróleo de esquisto bituminoso.
En particular, el republicano Kevin Cramer enfatizó en una carta dirigida a Trump que esa táctica de presión se ha convertido en la norma para Rusia, pero la participación de Arabia Saudita, un socio estratégico de EE.UU., “es especialmente preocupante”.
Cramer, senador por el estado de Dakota del Norte, rico en petróleo, instó al presidente a embargar el petróleo de Rusia, Arabia Saudita y “otras naciones de la OPEP, como Irak”.
Junto con otros nueve senadores republicanos, Cramer mantuvo este 18 de marzo conversaciones telefónicas con el embajador saudí en EE.UU. y la princesa Reema bin Bandar Al Saud, con la esperanza de convencer a Riad de que deje de inundar los mercados mundiales de petróleo.