La Directora del CECCHI (Centro de Estudios de Corea y China) y coordinadora del grupo Corea en el CARI (Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales) detalló a través de la 99.9 la situación en Corea del Norte y las restricciones que se sufren.
Hay realidades ocultas a simple vista dentro de la política internacional. En Corea del Norte, se empezó a expresar preocupación por la salud de su líder Kim Jong-Un luego de que desapareciera de la escena pública en momentos especiales.
Donald Trump fue quien públicamente indicó que se encontraba bien, pero el sistema hermético norcoreano no permite precisiones claras. La Directora del CECCHI (Centro de Estudios de Corea y China) y coordinadora del grupo Corea en el CARI (Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales), Mercedes Giuffre es especialista en la política de este país y brindó algunas consideraciones en la 99.9: “Corea del Norte es un país sumamente cerrado en si mismo, hermético y prácticamente no se pueden conseguir informaciones de lo que sucede allí. Están todos pendientes de las fotografías que presenta el gobierno, hay un par de diarios y ambos pertenecen al estado con propaganda estatal y culto al personalismo”.
Como ejemplo, agregó que “cuando murió el padre del actual líder coreano, se dio la noticia dos días después. Hicieron un acuerdo interno y luego de dos días dieron a conocer la noticia”.
Socialmente había un acto donde se esperaba la presencia del mandatario y cuando no apareció, comenzaron las sospechas: “hay dos festejos muy importantes en Corea del Norte. Uno es el 15 de abril que es el cumpleaños del abuelo del presidente donde hay desfiles y una parada militar. Esta vez estuvo ausente y ahí saltaron las alarmas. Volvió a aperecer el 1° de mayo inaugurando una planta de fertilizantes”.
En esa reaparición, se hizo un exhaustivo análisis de la foto para intentar un explicación: “examinaron la foto y le descubrieron una pequeña marca en la muñeca que podría haber sido donde se hace una incisión en la arteria para luego colocar un stent, son todas suposiciones”.
Las restricciones en el régimen de Corea del Norte luego de las guerras vividas generan una vida en sociedad muy particular. Al respecto, Giuffre explico que “todo lo que tiene que ver con la religión está absolutamente prohibido. Cuando entrás a Corea del Norte, te revisan el equipaje, las tarjetas de memoria, las cámaras fotográficas y que no haya propaganda religiosa y democrática”.
Hay incluso diferentes maneras de tener información internacional en medio de las restricciones: “lo que se conoce relativamente poco es que tienen un ejército sin armas de unas 150.000 personas que trabajan para Corea del Norte por todo el mundo. Tienen trabajadores de la construcción en la mayoría de los países que pertenecían a la antigua Rusia Soviética. Les son retenidos los salarios que van a la embajada y luego se gira a un centro especial secreto”. También repiten una de las cuestiones que está muy latente en medio de la pandemia que son los médicos “de exportación”: “otra parte interesante que practica Cuba también es la exportación de médicos. Les retienen un 70% o directamente ni les pagan, deben subsistir durante 3 años en los lugares donde los mandan. Son ingresos para Corea que tiene muy pocas cosas para exportar”, remarcó.
Por último, destacó la tensión constante del pueblo coreano y de la zona por las presiones militares: “toda la zona de Corea del Sur y Japón es militarmente muy caliente por las bases que tiene Estados Unidos en estos lugares y el terror que tienen a los misiles de Kim Jong-Un. Hay 47.000 soldados americanos en Japón. Ese miedo y tensión es permanente”, finalizó.