Así lo indicó a través de la 99.9 el argentino varado en Suecia que, además, analizó la reacción en ese país ante la pandemia de COVID-19.
A pesar de que ha pasado un largo tiempo de aislamiento en gran parte del mundo, hay muchos argentinos que están varados en distintos destinos sin respuesta aún para volver al país.
En Suecia, se encuentra el mendocino Juan de Dios Alfonso que habló en la 99.9 sobre su situación: “Aquí somos unos 100 argentinos y estamos coordinados con Dinamarca y la región escandinava donde completamos a 200. Cancillería y Embajada están trabajando pero no vemos un programa futuro”.
Luego agregó que “vivimos con incertidumbre porque no sabemos cuándo habrá un vuelo ni como se manejarán. Han publicado algunos vuelos hasta el 11 de mayo, pero desde ahí incertidumbre absoluta”.
El principal problema que afrontan, es la visa que, en muchos casos han vencido porque tiene que ver con plazos de trabajo o estudio: “Las visas pueden durar hasta un año. Desde migraciones nos piden. para no permanecer de manera ilegal, la extensión de las visas que cuesta 150 euros. Nos vienen diciendo desde el gobierno argentino que están negociandolo pero hace dos meses que no tenemos ninguna definición”.
Desde su experiencia, Alfonso habló sobre la reacción de la sociedad sueca ante la pandemia donde hay más limitaciones propias que obligaciones a cumplir: “en Suecia hay circulación libre del virus, no hay cuarentena obligada pero sí algunas restricciones. Hay un componente cultural, acá la gente respeta y se autoaisla. Cuando brotó el tema, los mismos suecos empezaron a hacer cuarentena antes de que lo advierta el gobierno. Hoy se indica que las personas mayores de 70 años se queden en casa, que no viajen en transporte público y que no haya reuniones de más de 50 personas manteniendo la distancia social”.
La capacidad del sistema de salud en cada país es un condicionante absoluto para atravesar la pandemia y donde radica el gran problema de las muertes masivas: “en Suecia hay 1.500 personas internadas en terapia intensiva, el 73% tiene un factor de riesgo extra. El resto de los infectados, tiene una mortalidad muy baja”. Por otro lado, señaló que “en país para estar bien asegurado ante pandemia o guerra, necesita al menos 10 camas cada 100.000 habitantes. Los países que están sufriendo más la pandemia están al borde, Alemania tiene 34 camas cada 100 mil, Argentina cuenta con 18.7 cada 100 mil por lo que tenemos más que Italia o España, por ejemplo”.
Mientras tanto, espera por un avión que lo traiga nuevamente a casa, aunque aclaró que “los vuelos no son de repatriación, habría que cambiarles el nombre porque los cobran. No digo que esté mal cobrarlo porque sale plata, por ejemplo un viaje Londres-Buenos Aires sale 17 mil pesos más el 30% que nos siguen cobrando”.