El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) decidió desplegar en la red de metro (subte) a 500 policías más después de que en la noche del viernes al sábado se produjeran cuatro apuñalamientos en dos horas en la misma línea, que dejaron dos fallecidos.
“El público debe saber que va a ver un número muy elevado de policías uniformados en Nueva York, ya sea en los propios trenes o en las plataformas”, dijo en una rueda de prensa el comisario de la Policía de Nueva York, Dermot Shea.
Según el alto cargo de las fuerzas del orden, los cuatro ataques ocurrieron en la línea A, que recorre Nueva York desde el norte de Manhattan hasta la zona sur de Queens.
Las cuatro víctimas eran ciudadanos sin techo, y los dos sobrevivientes aún se están recuperando de sus heridas.
Los ataques comenzaron en la noche del viernes al sábado cuando un hombre de 67 años fue apuñalado por un desconocido en la estación de la calle 181, en la zona norte de Manhattan, y fue asistido después en un hospital cercano.
Además, un hombre muerto fue hallado con heridas de arma blanca en el cuello y torso en la estación de Far Rockaway-Mott Avenue en Queens el sábado cerca de la medianoche, según detalló la jefa de Transporte de la Policía de Nueva York, Kathleen O’Reilly.
Unas dos horas más tarde, se encontró inconsciente a una mujer de 44 años dentro de un vagón en la estación de la calle 207, en el norte de Manhattan, con “varias heridas de arma blanca”, y fue trasladada al hospital, donde se certificó su muerte.
Menos de 20 minutos después, la policía respondió a llamadas de un hombre de 43 años que había sido apuñalado en la estación de la calle 181 de Manhattan, que fue trasladado a un centro hospitalario, donde tuvo que ser sometido a una operación.
Aunque las fuerzas del orden admitían en la noche del sábado que no tenían “demasiada información” sobre el autor de los hechos, poco después anunciaron el arresto de un hombre sin techo, que encontraron con sangre seca en su ropa y con un cuchillo entre sus pertenencias que se cree es el arma homicida.
Ayer, la policía interrogó al sospechoso, cuya identidad no se ha hecho pública.
En general el número de crímenes ha descendido últimamente en Nueva York, según la Autoridad Metropolitana de Transporte de la ciudad y la Policía local, pero en el último año se ha registrado un aumento de asaltos en el metro pese a que el número de pasajeros ha descendido un 70 por ciento por la pandemia del coronavirus.