La Diputada Nacional habló en la 99.9 cuando está cerca de cumplirse un año de la aparición sin vida de Facundo Astudillo Castro en medio de la cuarentena y cuando el presidente recibía visitas en Olivos.
El próximo 16 de agosto se cumplirá un año de la aparición sin vida de Facundo Astudillo Castro en pleno desarrollo de la pandemia. Todavía no se sabe nada de ese extraño caso y se sigue reclamando por justicia.
La Diputada Nacional Karina Banfi habló al respecto en la 99.9: “hay que recordar cuando fue visto por última vez Facundo. Lo detuvieron en un retén en Buratovich, al sur de la provincia de Buenos Aires, por no tener el certificado de circulación. Fue alrededor del 30 de abril y en donde en esa época el presidente de la Nación decía que aquellos que incumplían la cuarentena los iba a perseguir con el Código Penal”.
Paralelamente, se descubre ahora que por esos días, el presidente de la Nación tenia sus reuniones en Olivos lo cuál genera mucha más indignación: “ahora vemos el disparate y la fiesta que era Olivos donde casi te diría que mágicamente el que tocaba al presidente se volvía personal esencial. Eso es abuso del poder, eso es un delito y tiene que tener sus consecuencias, incluso consecuencias judiciales. Pero principalmente, un pedido de disculpas a todos nosotros”.
Lo extraño es que nadie se interesó en investigar a fondo el tema para dar respuestas a la familia: “hasta el día de hoy, y esto es lo más siniestro, no sabemos qué es lo que pasó. No hay una investigación seria alrededor de esto, hay solo obstáculos y los medios de comunicación amigos del poder acusan a la madre de querer voltear a un gobierno. Seguimos buscando justicia por todos estos chicos que parece que si no los mataba el COVID, lo mataba la policía”.
Justamente refiriendose a las visitas en Olivos, agregó que “anoche a última hora presente un pedido de acceso a la información para saber que equipo de trabajo tiene la primera dama, cuantas personas la integran, que hacen. El peluquero entró 22 veces entre el 20 de marzo y el 31 de agosto que es la duración del aspo, queremos saber que iba a hacer. Ni hablar del instructor del perro. Hay gente con la cual yo vengo conversando todo este tiempo y es mucha la indignación que tienen porque sus hijos no fueron a la escuela, vivían tres personas en 50 metros cuadrados en la ciudad de Buenos Aires con un perro. Los chicos no pudieron ir a las plazas, nos podían más que hacer una vuelta a la manzana para hacer compras indispensables. Creo que la distorsión del mensaje y el mal uso de la autoridad, los argentinos deben cuestionarlo”.
La manera que propuso para llevar adelante el cuestionamiento fue en la urna: “a veces parece que está testeando el cambio del sistema, más parecido al cubano o a un sistema venezolano con niveles de restricción sobre nuestros derechos muy agudos y cuál es nuestra intolerancia como sociedad. Si le damos una mayoría noviembre de este año en el Congreso de la Nación yo creo que van por todo”.