El maratonista, periodista y crítico de cine habló desde Utah, Estados Unidos donde está varado sin poder regresar al menos hasta los primeros días de septiembre: “vinimos por una vacaciones de 14 días y se transformó en un viaje de 50”.
Hay miles de historias en estos momentos alrededor del mundo de personas que no pueden regresar a la Argentina en el contexto de pandemia por las restricciones que ha impuesto el gobierno nacional. Uno de ellos es el maratonista, periodista y crítico de cine Santiago García que está en Estados Unidos sin poder regresar.
En la 99.9, contó los detalles de un viaje que eran prácticamente unas vacaciones y terminó siendo una tortura: “viajamos en julio para correr un maratón. Estamos en Utah, vinimos a pasar unas vacaciones luego del Maratón y el vuelo de regreso se canceló y desde el primero de agosto estamos acá y vamos a tener que quedarnos hasta septiembre”.
Lo que le sucede a Santiago, le puede pasar a cualquier y comprometer seriamente la economía de una persona que tiene una planificación para cierta cantidad de días: “íbamos a estar de vacaciones 14 días y se transformó en un viaje de 50 y las personas que te dejan varado no saben si tenes elementos para sobrevivir o te quedas sin nada. Es más peligroso que un castigo concreto, es como una ruleta rusa donde podés quedar en la lona de una forma insalvable”.
Por su trabajo en los medios, creo lazos que hoy le permiten tener un techo donde vivir mientras espera que lo dejen regresar. Como siempre, los argentinos demuestran en este tipo de situaciones cuan solidarios pueden ser: “la solidaridad de los argentinos es absoluta porque se fueron del país en diferentes crisis y conocen lo que significa estar lejos de casa. Uno puede estar enojado con el país por las medidas siniestras que se están tomando pero también se pone contento porque hay gente de bien por la que uno se siente argentino a veces. A mí me cuesta sentirme argentino si el gobierno no me deja volver. Para que sirve tener un país si no es para que te cuiden. De que sirve un pasaporte si no me dejan volver”.
Ahora tendrán que seguir esperando porque tienen fecha de regreso para el 6 de septiembre, pero la reflexión de García es que no hay siquiera intención de ocultar este tipo de maltrato hacia los propios argentinos: “Todo está para la vista, no es nada secreto. Son cosas que suceden a la luz del día, es una especie de castigo a las aerolíneas de todo el planeta junto al curro de una aerolínea que da pérdida”, finalizó.