El Diputado Nacional señaló en la 99.9 que no se debe admitir una reivindicación de los actos terroristas con hechos como la obra que generó controversia en Tucumán.
Una obra en la Casa de Tucumán despertó la indignación de mucha gente. Se realizó una réplica de las pintadas de Montoneros cuando tomaron ese lugar y políticamente se consideró como un hecho muy ofensivo.
El Diputado Francisco Sánchez se refirió en la 99.9 a lo que significa reivindicar este tipo de actividades de los terroristas: “es lógico el repudio porque hay muchas personas lamentablemente que en los últimos tiempos están queriendo reivindicar lo más terrible que nos ha pasado en los últimos 50 años a los argentinos y me refiero a los grupos terroristas, a grupos que a través del terror han tratado de generar un cambio político en nuestro país y muchas veces nos olvidamos, lo dejamos pasar y nos quedamos con la historia oficial que dice que había unos militares malos que atacaban a unos jóvenes revolucionarios buenos”.
Sánchez aclaró que hay una larga historia de terrorismo en Argentina y que no se debe perder de vista el objetivo que perseguían estos movimientos: “en ese relato oficial que prevalece está Montoneros que en 1960, ya tenían su primera víctima del terrorismo en Argentina. Fue una chiquita de 4 años. Pusieron una bomba en la casa, en un departamento donde vivía entre otros, un oficial de la Armada. Hirieron a varias personas y mataron a esta chiquita de 4 años. Eso no fue el grupo Montoneros que se creó un poco más adelante, pero sí fueron agrupaciones que después fueron confluyeron y se organizaron en lo que fue Montoneros y el ERP. Si nosotros no vamos a hacer realmente el empleo de esos tres términos que son tan habituales que son Memoria, Verdad y Justicia; no es para recordar a los terroristas que tuvo Argentina, sino que son palabras que se deben los pueblos siempre y en toda circunstancia”.
Para el legislador hay un peligro latente en este tipo de manifestaciones porque a futuro podría generar nuevas manifestaciones terroristas: “el problema que se nos puede plantear a todos es que quienes reivindican, quieran repetir esa historia que fue exitosa para ellos en el largo plazo. Hay que estar atentos a quienes intentan volver a imponer esa visión del mundo a los demás a través de las armas y la violencia”.
Algo similar sucede actualmente en el sur con los grupos autodenominados mapuchistas: “al igual que las organizaciones terroristas de la década del 60 y 70 que tenían coordinación, organización y financiamiento extranjero en ese momento soviético a través de Cuba, están las organizaciones pseudo mapuches que en realidad de mapuche no tienen nada. Lo que abrió las puertas fue sobre todo la Constitución del 94, pero tienen que demostrar si efectivamente tiene de esos derechos ancestrales. Nos empezamos a comer los versos, empezaron a hacernos sentir culpables de que éramos asesinos y nuestras manos estaban manchadas de sangre”.