Tiroteo en Michigan: acusaron de homicidio involuntario a los padres del alumno que asesinó a cuatro adolescentes

Las autoridades buscan actualmente a James y Jennifer Crumbley, cuyo paradero es desconocido. En Estados Unidos es inusual que los padres sean imputados en tiroteos escolares cometidos por sus hijos.

Una fiscal formuló el viernes cargos de homicidio involuntario contra los padres de un chico de 15 años acusado de matar a cuatro estudiantes y herir a otras siete personas en una escuela secundaria de Michigan.

James y Jennifer Crumbley fueron acusados de cuatro cargos cada uno de homicidio involuntario, y en este momento son buscados por la policía, porque se encuentran en paradero desconocido.

Así lo confirmó el sheriff del condado de Oakland, Michael Bouchard, en declaraciones a la cadena de televisión CNN, cuando fue preguntado sobre si James y Jennifer Crumbley están desaparecidos.

Las autoridades dicen que Ethan Crumbley abrió fuego poco antes de la 1 de la tarde del martes en la escuela secundaria Oxford, unos 50 kilómetros al norte de Detroit. Siete estudiantes y un docente recibieron heridas antes de que Crumbley se entregara a los agentes de policía.

Cuatro estudiantes murieron y otras siete personas resultaron heridas en el ataque. Tres estaban hospitalizadas en condición estable. El arma semiautomática fue comprada legalmente por James Crumbley la semana pasada, dijeron los investigadores.

En Estados Unidos es inusual que los padres sean imputados en tiroteos escolares cometidos por sus hijos, pese a que la mayoría de las armas usadas son obtenidas por los menores de la casa de un padre u otro familiar, dicen expertos.

No existe una ley en Michigan que requiera que los dueños de armas las mantengan fuera del alcance de menores. McDonald, sin embargo, indicó que hay más evidencia para presentar cargos.

“Todo lo que puedo decir es que esas acciones por mamá y papá van mucho más allá de negligencia”, le dijo a la emisora WJR-AM. “Obviamente, vamos a enjuiciar al autor de los disparos (pero) hay otros individuos que deberían rendir cuentas”.

El comisario Mike Bouchard reveló el miércoles que los padres se reunieron con funcionarios escolares sobre la conducta de su hijo en clase, apenas horas antes del tiroteo.

McDonald dijo que la información sobre lo que había preocupado a la escuela “muy probablemente se conocerá pronto”. Crumbley se quedó en la escuela el martes tras la reunión y salió posteriormente de un baño con el arma, disparando contra estudiantes en un pasillo, dijo la policía.