José Santos: “Hicimos una investigación que lleva al tratamiento de pacientes con COVID-19 con diuréticos comunes”

El Jefe de Terapia Intensiva de la Clínica Colón, habló en la 99.9 sobre una línea de trabajo que están llevando adelante con resultados positivos hasta el momento y que consiste en tratar a pacientes graves de COVID-19 con diuréticos porque comprobaron que además de la inflamación se provoca un edema pulmonar que se da por la supresión de una proteína que evita el exceso de líquidos.

De a poco, la investigación alrededor de los efectos del COVID-19 empieza a dar respuestas acerca de un tratamiento más sencillo para las personas contagiadas que ingresan a los hospitales con cuadro que comprometen los pulmones. Desde Mar del Plata, se ha descubierto una de las potenciales causas de la gravedad de los casos.

El Jefe de Terapia Intensiva de Clínica Colon, José Santos es quien ha llevado adelante la investigación con su equipo de trabajo y contó a través de la 99.9 de que se trató: “desde el comienzo de la pandemia se hicieron numerosas investigaciones para saber porque el COVID-19 provoca tanto daño pulmonar. En ese entendimiento, desde el principio se denunciaba un gran proceso inflamatorio en el pulmón que siempre se pensó como la causa en el fracaso de la función pulmonar. Se hicieron ensayos terapéuticos con antiinflamatorios y los resultados fueron muy modestos o pésimos”.

Ellos entonces, empezaron a buscar en otro lugar un posible motivo: “nuestro arsenal terapéutico está muy limitado en la actualidad. Observamos en la tomografía que había particularidades que no eran lógicas en ese contexto. A partir de ellos empezamos a considerar que la causa del fracaso de la función del pulmón no fuera exclusivamente un proceso inflamatorio, sino que en realidad fuera una sucesión de daños que sufre el pulmón”.

Lo que plantearon entonces, es que había otro proceso al cuál se debía prestar atención: “cuando el coronavirus ingresa, hay un proceso de inflamación pero nuestra hipótesis es que dura 5 o 7 días y luego desaparece. A ese proceso se le sucede un segundo daño y pensamos, en base a evidencia, que podía ser un edema pulmonar. Con esa hipótesis, el tratamiento era darle diuréticos y lo hicimos para sacarle líquido. La respuesta fue muy esperanzadora porque el paciente responde en pocos días”.

A partir de ahí, pudieron publicar a nivel internacional esta conclusión para ver si en todo el mundo se puede utilizar un medicamento tan básico para evitar los casos graves de COVID-19. “En el trabajo, sobre 20 pacientes contamos la experiencia porque todos tuvieron una mejora en la oxigenación, en la tomografía y los exámenes complementarios. Hay una esperanza de tener un tratamiento accesible, económico y que puede ser puesto en marcha en cualquier unidad de terapia intensiva porque utilizamos un diurético común. Lo que nosotros planteamos no es sólo una hipótesis y su comprobación, sino que desarrollamos porque se puede desarrollar el edema en los pacientes”.

Ese era otro punto clave, entender que sucede en el cuerpo para llegar a un edema que muchas veces, junto con la inflamación, provoca la muerte del paciente. Santos explicó que “cuando el coronavirus entra en el cuerpo humano encuentra que, a través de una proteína conocida técnicamente como ECA-2 se puede unir a las células humanas. A partir de ahí, pone a la célula como una esclava a hacer copia del COVID-19, hasta que estalla y se muere. Cuando se muere libera miles de copias del COVID-19 que hacen el mismo ciclo. Todo el mundo se focalizó en el daño que hace el coronavirus cuando entra a las células pero nosotros nos focalizamos en la ECA-2”.

Ese análisis y estudio, los llevó a conclusiones interesantes: “nos preguntamos que función tenía esta proteína y hay investigaciones que demuestran que sirve para eliminar el exceso de líquido. Si perdemos la ECA-2 se genera una gran retención de líquido que en los pacientes con COVID-19 permanece en la zona inflamada, en este caso, los pulmones”.

Esta novedad plantea una manera distinta de enfocar el problema y que puede evitar que muchas personas padezcan la gravedad de la afección: “es un cambio muy significativo en el enfoque y tenemos esperanzas de que se de a conocer a toda la comunidad científica internacional. Difundir esta investigación es un trabajo arduo, lo hemos publicado en Europa y estamos haciendo la difusión con todos nuestros colegas. Ojalá sea la forma de salir de este laberinto fatal que es la pandemia”.