Los familiares indicaron en una rueda de prensa que estaban decepcionados por el resultado de la investigación, aunque no sorprendidos.
El caso de Emmett Till, un afroamericano de Chicago de 14 años al que le dieron una brutal paliza y le dispararon en la cabeza en 1955 sin que se presentaran cargos, ha sido cerrado este lunes, según un comunicado publicado por el Departamento de Justicia de EE.UU.
Víctima del racismo reinante en la época, el hombre fue atacado en el estado de Misisipi por, supuestamente, haber coqueteado con Carolyn Bryant Donham, una mujer blanca a la que habría silbado, según testigos. Las autoridades estatales acusaron a Roy Bryant y a J.W. Milam del asesinato. Durante el juicio, Donham declaró que Till le había hecho proposiciones y le había tocado la mano, el brazo y la cintura. Mientras, Bryant y Milam fueron absueltos y en 1956 confesaron haber secuestrado y asesinado al sujeto.
Sin embargo, en el libro ‘The Blood of Emmett Till’ (‘La sangre de Emmett Till’) redactado por Timothy Tyson, se reveló que Donham se había retractado de su testimonio en una entrevista con el escritor mantenida en 2008, en la que afirmó que las historias anteriores que contó “no eran ciertas”.
Cuando fue interrogada sobre la cuestión, la mujer negó haberse retractado y no aportó más información que la descubierta en la anterior investigación federal. De esa forma, no se logró comprobar que mintiera.
Los familiares de Till indicaron en rueda de prensa que estaban decepcionados por el resultado de la investigación, aunque no sorprendidos. Ollie Gordon, una de sus primas, aseveró que “no esperaba que encontraran ninguna nueva prueba”.
Por su parte, Wheeler Parker Jr., primo de la víctima, expresó que el cierre de la investigación pone fin a varios años dolorosos para los seres queridos de Till. “Hemos sufrido el dolor por su pérdida durante 66 años”, señaló, agregando que nunca olvidarán lo ocurrido.