La empresaria forestal que junto con su familia son productores en Corrientes, se refirió en la 99.9 a los incendios que sufrieron y les consumió literalmente toda su propiedad: “todos tenemos la culpa porque nadie se ocupó cuando debía hacerlo”.
Los incendios en Corrientes habían sido anticipados por muchas personas de las zonas afectadas a las autoridades de la zona pidiendo ayuda antes que todo termine descontrolándose como pasa en la actualidad.
Una de las que advirtió en su momento que había un fuego en expansión y se podía controlar fue la empresaria forestal Carina Lanaro que forma parte de una familia de productores asentada en el Paraje Galarza. En declaraciones a la 99.9, después de que se le incendiara toda la propiedad, detalló los inicios del problema: “primero comenzamos a sufrir la sequía que no es ninguna novedad para nosotros por el fenómeno de La Niña. Padecimos un incendio el 20 de noviembre de 2020 que se inició por una quema que no estaba permitida por un decreto provincial. Una empresa muy importante hizo una tala y luego una quema controlada que se le fue de las manos pasando a los vecinos. Llegó a abarcar 12 mil hectáreas, fue un incendio muy grande y no tuvimos asistencia de ningún tipo”.
A ese incendio, no se hizo referencia ni se buscó culpables, pero quizás haya sido porque estaban vinculados al gobierno nacional: “todos los vecinos estamos tomando acciones legales contra la empresa, fue denunciado en la provincia y el municipio. Fue parado sólo por las lluvias que tuvimos. Esa empresa es de Hugo Sigman y se llama Pomera”, expresó sobre el empresario vinculado al kirchnerismo.
Los habitantes del lugar quedan en medio de una disputa política donde unos les tiran responsabilidades a otros, pero nadie se hace cargo: “acá todos tenemos culpas, no podemos tirarle esto a una bandera política. Nadie se ocupó, ninguno de los gobiernos se ocupó cuando debía ocuparse. El gobierno nacional mintió diciendo que había un avión hidrante apostado desde el 4 de enero, pero no es que salen tan fácil los aviones cuando hay un incendio. Para la emergencia que había, un sólo avión hidrante no te sirve. El frente que devoró nuestro sector fue de 3 kilómetros y medio de ancho. A la situación se le sumó un viento que antes no había acá con ráfagas de hasta 80 kilómetros por hora”.
Mientras el incendio avanzaba, el gobierno tenía sus propias prioridades que no pasaban por los correntinos afectados: “se olvidaron de la gente, priorizaron los carnavales, las reuniones en el exterior y dejaron a la reserva más grande que tenía la Argentina. Lo más triste es que perdimos todo, pero no mi familia, sino el pueblo de Galarza, los vecinos y la Reserva se perdió, miles y miles de animales. Estoy trabajando ahora para hacer un centro de recuperación de animales en el campo que se nos incendió”.
Juan Cabandié, Ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, insiste en desligarse de su responsabilidad pero no es el único. Según explicó Lanaro, estaban advertidos de lo que podía pasar: “se los había anticipado a las autoridades. Le había escrito al Gobernador, al ministro de la Producción, al director de Vialidad y hasta al operario que piden los aviones a la Nación. Incluso les mandé las coordenadas de como estaba caminando el fuego cuando estaba a 6 kilómetros y era controlable. Nos respondieron que estaban enterados y se iban a ocupar pero nunca hicieron nada. Les comunicamos que los vientos estaban indicados para pasar por el frente e iría hacia el Paraje Galarza que estaba olvidado en el mapa. La gente ahí vivía en condiciones deplorables”.