El legislador porteño y economista habló en la 99.9 sobre la situación de inflación actual y los problemas que tiene el gobierno: “están desconectados con lo que pasa en la calle”.
Todo tema vinculado a la política en la actualidad parece tener un denominador común: la inflación y que hacer con ella. No es un tema sencillo pero los economistas tienen claro que la tendencia del alza en los números seguirá presente.
El legislador porteño y economista Roberto García Moritán hizo su análisis en la 99.9 indicando que “la circulación del dinero se viene acelerando, eso es innegable. Guzmán dice que no habrá mes con inflación más alta que marzo pero habrá que ver como hacen para frenarlo. Esto genera en los comercios un efecto adverso, muchos tendrán que subir los precios para asegurarse el día a día. Estamos viendo los males que trae la inflación como fenómeno monetario, la canasta básica es inalcanzable incluso para la clase media”.
En base a todo esto, se tienen que cerrar paritarias con muchos sectores cuando los números están muy distorsionados: “la gran pregunta ahora es en cuanto se tiene que ajustar el salario, esa negociación afectará también directamente a la inflación. Nadie le cree hoy por hoy a este gobierno y eso hace todo mucho más complicado. La palabra presidencial está muy devaluada, no paran de decepcionarnos y es triste. Me duele ver la investidura presidencial tan lastimada”.
Para García Moritán, lo peor es que no están cerca de la gente, no la entienden, no empatizan y toman decisiones que nada tienen que ver con las necesidades reales de los argentinos: “están desconectados con lo que pasa en la calle, nunca levantaron una persiana, nunca fueron al Mercado Central, no lidiaron con proveedores, no contrataron gente, no tuvieron que despedirla con lo triste que es, no tuvieron que cerrar un negocio al ver que el país no te ayuda a hacer realidad tu sueño. Como no lo conocen, no lo sienten, no empatizan. Somos un pueblo que quiere condiciones normales para levantarnos a la mañana y hacer lo nuestro, no queremos que nos resuelvan la vida. Por alguna razón, se les metió en la cabeza a estas personas que tienen que resolver nuestros problemas, pero no entienden nada”.
Cada paso que dan, no hacen más que ratificarlo como pasa ahora con el impuesto a la renta inesperada: “no piensan en las pérdidas inesperadas que venimos teniendo hace muchos años, muestra a buenas vistas que no les importa nada la gente”.
Por último, indicó que cuanto más asistencialismo del estado haya, a los argentinos nos será más difícil ser libres para llevar adelante los emprendimientos: “nos cuesta entender como sociedad que a mayor Estado, menor grado de libertad. Esa mayor presión del estado y bajada de línea en las escuelas y políticas en las universidades; nos quitan posibilidades de ser libres y resolver nuestros problemas por cuenta propia”.