En diciembre perdió los fueros como senador. Se trata de la denuncia presentada en 2019 por su sobrina segunda y excolaboradora.
El exgobernador de Tucumán José Alperovich fue procesado por abusar sexualmente de su sobrina, cometido entre 2017 y 2019.
En diciembre, Alperovich había perdido sus fueros como senador nacional del Frente de Todos. La fiscalía había pedido tres veces su indagatoria y el juez en lo criminal Osvaldo Rappa lo convocó de manera virtual para el miércoles 20 de abril.
La denuncia contra el exgobernador tucumano fue presentada en 2019 por su sobrina segunda y excolaboradora, quien lo acusó por hechos de abuso sexual presuntamente ocurridos entre 2017 y 2019.
José Alperovich, procesado por abuso sexual
Los fiscales Santiago Vismara y Mariela Labozzetta, de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres, fueron quienes dieron impulso a la investigación, con un expediente que se unificó en la ciudad de Buenos Aires, a pesar de que la denunciante también había realizado una presentación en Tucumán, la provincia que Alperovich gobernó durante 12 años.
“Esta mañana cumplí con la orden judicial, y me presenté a declarar ante el juez Osvaldo Rappa, en el marco de la denuncia en mi contra”, había escrito en su cuenta de Twitter luego de declarar. “Declaré durante más de una hora y media, y realicé un extenso descargo de mi defensa, analizando todas las pruebas presentadas en la causa y demostrando que se trata de una falsa denuncia con fines de excluirme de la escena política”, argumentó en su momento.
La denuncia contra Alperovich por abuso sexual
La denuncia contra el exgobernador tucumano fue presentada en 2019 por su sobrina segunda y excolaboradora, quien lo acusó por hechos de abuso sexual presuntamente ocurridos entre 2017 y 2019.
“Durante un año y medio sufrí violaciones a mi integridad física y sexual. El avasallamiento fue demoledor. Tanto que ni siquiera pude ponerlo en palabras. Él oscilaba libre y cómodamente en los tres escenarios ante los que me posicionaba: el familiar, el laboral y el del horror de la intimidad que me forzaba a vivir con él”, afirmó entonces su sobrina.
En ese entonces, la causa se tramitó en dos jurisdicciones distintas: en el fuero criminal y correccional de la Ciudad de Buenos Aires y en la Justicia tucumana. Sin embargo, tras una resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación de mayo pasado, se resolvió que todos los hechos debían investigarse en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°35 de la Ciudad de Buenos Aires