El analista internacional se refirió en la 99.9 a la respuesta que brindó Joe Biden ante la amenaza de ausencia de México y Brasil, pero también la posibilidad de una cumbre paralela de la Celac.
La respuesta del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ante la posibilidad de una reunión paralela a la Cumbre de las Américas protagonizada, entre otros por Argentina, llevó a que el mandatario quisiera asegurarse la presencia de la mayor cantidad de países posibles.
En ese sentido, se ofreció al gobierno nacional una reunión bilateral y la explicación de ese gesto, la brindó el analista internacional Rosendo Fraga, en la 99.9: “esto se explica por la crisis de Estados Unidos con la Cumbre de las Américas en Los Ángeles. La ausencia que anunciaron López Obrador por la no invitación de Cuba y Nicaragua y también de Bolsonaro porque lo iban a criticar, lo han hecho pensar que sería un fracaso porque estos dos países son dos tercios de la región en población y PBI. La administración Biden le dio una reunión bilateral a Bolsonaro durante la cumbre para que vaya. Ahora para evitar ese problema, también le da una reunión bilateral a Alberto Fernández pero no durante la Cumbre, sino con fecha a confirmar”.
Para el especialista, se trata de una cuestión netamente de imagen para que la reunión en Los Ángeles tenga la mayor cantidad de mandatarios posibles: “creo que Estados Unidos veía que la cumbre iba a ser un fracaso y López Obrador no modificó su decisión. Lo que ha hecho Biden es asegurarse la concurrencia de estos mandatarios a la reunión. Con Brasil y Argentina se evita el fracaso”.
A partir de esa situación, hay otro tema en particular que es el tema que se terminará abordando en esa reunión con Alberto Fernández. Justamente hay uno que le preocupa mucho a la administración Biden: “el tema número 1 de la reunión bilateral es el acuerdo entre Argentina y China para la construcción de la cuarta central nuclear con una inversión de 8.300 millones de dólares que China financia en un 85%. Ese es el tema número porque es una tecnología importante para Estados Unidos y que China no influya en América del Sur es un tema central”.
De todas maneras, Fraga considera que no habrá marcha atrás en esa situación porque es demasiado tarde para el plateo que pretende hacer Estados Unidos: “si le preocupa tanto el tema, tendría que haberlo planteado antes de que se firmara el acuerdo. En esto creo que hay una política un tanto desordenada en la región porque se firmó tres meses antes de que el presidente planteara el viaje a Rusia y China, no era un secreto. Si la diplomacia de Estados Unidos hubiera planteado su posición antes de que Argentina firmara con el Fondo y le hubiera brindado su apoyo, sería todo distinto”.