El perito naval se refirió en la 99.9 a la situación del Buque de Investigación Pesquera Oceanográfica “Victor Angelescu” que sufrió una rotura de máquinas mientras navegaba y se percataron que está abordado por prefectos, en vez de contar con marinos mercantes.
Una situación generada alrededor del Buque de Investigación Pesquera Oceanográfica (BIPO) Víctor Angelescu, despertó las críticas porque luego de una rotura saliendo de Uruguay que evidenció la presencia de prefectos a bordo de un buque del INIDEP.
El perito naval, Fernando Morales habló en la 99.9 brindando algunos detalles de lo que es una situación muy irregular: “la dirigencia política oscila entre el analfabetismo y la ignorancia. Cada vez que nos llaman para que lo asesoremos nos damos cuenta que son analfabetos náuticos, tenemos que empezar a hablar de lo que es babor de estribor”, indicó.
La presencia de la Prefectura Naval a bordo de este buque causó asombro entre los propios entendidos del caso en Uruguay porque se trata de una situación económica avalada políticamente: “el Angelescu pasó por Uruguay y por eso nos llamaron para saber que pasaba porque no es un barco policial, sino civil y científico pero tiene Prefectura adentro. Hay un convenio entre dos ministerios con uniformados que dicen que si a cualquier cosa porque sino se les termina la carrera. Es una intervención policial arriba de un barco porque el INIDEP quiere ahorrar plata entonces en vez de pagar sueldos de marinos mercantes, con esto la Prefectura tiene un barco más para navegar, poco, pero para navegar”.
A partir de la profundización en el tema, se llegó a saber que el viaje que estaban haciendo con destino a Uruguay estaba lejos de ser una misión de prospección pesquera: “aparentemente se quedaron sin presión de aceite, fundieron varios cojinetes y eso demandará una buena inversión para repararlo. Este polémico viaje se origina para una prospección transecta pero acá en Uruguay lo que dicen es que lo trajeron porque quieren hacer un barco similar y vinieron a mostrarlo”.
Lo preocupante es que toda esta situación está avalada y gestada a través del gobierno a pesar de ser claramente irregular según lo expresado por Morales: “el estado como norma se permite hacer cosas que a los particulares no se les permite hacer. Eso aplica desde el ARA San Juan a tantas otras cosas, cuando tenemos un buque privado que tiene un certificado vencido, no puede navegar, pero cuando un buque público tiene un certificado vencido, le buscamos la excepción. Si el CONICET quiere tener un buque de investigación debe pagar los costos de tenerlo. Solucionamos algo que estaba mal con algo que también está mal”.