MARFICI. Ha concluido la novena edición del MARFICI, con un éxito que de algún modo corona una década de trabajo para traer a Mar del Plata el cine del mundo. Un evento que ya tiene un lugar en la agenda cultural del país, y que refleja acabadamente la explosión de creatividad que la revolución digital ha dado al séptimo arte. Una edición que introdujo la sección Cine Histórico, y dio la oportunidad de ver a un público que colmó la sala Melany para asistir a la obra del director Nemesio Juárez, “La revolución es un sueño eterno”, extraordinaria visión sobre la vida de quien fuera la voz de la Revolución de Mayo, Juan José Castelli.
Antes y después. El film de Nemesio Juárez, inspirado en el libro homónimo de Andrés Rivera, marca un punto de inflexión, un antes y un después en el cine de carácter histórico en nuestro país; por la magistral dirección, la exquisitez de su fotografía, la precisión del vestuario y la dialéctica entre los personajes que interactúan, que conducen a una idea clara sobre la profundidad de lo que estaba en juego en la época. Un film imperdible, camino de introducción para las generaciones contemporáneas, vinculadas de modo vital a la cultura audiovisual, a esa cita inexorable del conocimiento que es la historia nacional.
Un auténtico rock star. En el contexto del MARFICI, estuvo en la ciudad, desplegando una incansable tarea de promoción, el eterno mago René Lavand, que llegó a acompañar la proyección del documental que ilustra su vida, una realización de Néstor Frenkel que instala a quien ya es una referencia de culto para cuatro generaciones en el país y fuera de él. El film “El gran simulador”, en competencia en la categoría Documentales, se alzó con el premio a mejor film en esta edición, en un impactante broche de oro para la novena edición del Festival Internacional de Cine Independiente de Mar del Plata.
Demérito republicano. Según revela una encuesta, un porcentaje significativo de los votantes tiene “escaso interés” en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), y además, cuenta con muy poca y pobre información al respecto.
De acuerdo al sondeo realizado por la consultora D’Alessio Irol, al 39% de los encuestados, las PASO le son “indiferentes”, y para un 29%, son “un fastidio”.
Además, el 72% de los votantes no conoce ni siquiera la plataforma del candidato por el cual votará; sólo un 17% leyó y comparó propuestas antes de definir su voto, y 1 de cada 3 votantes considera “innecesario” informarse sobre las plataformas.
En tanto, el relevamiento también reseñó que cuando los amigos y la pareja no piensan como uno, 3 de cada 10 personas encuestadas han tenido controversias con la pareja y los amigos, y uno de cada 10 llegó a terminar vínculos por esta cuestión. “Si la pareja apoyara a otro candidato, la mitad intentaría evitar el tema, en tanto que 45 por ciento buscaría debatir y convencerla”, se indica en el parte de prensa.
En el caso de la política y las redes sociales, la encuesta establece que un 18% seguirá la jornada electoral por Facebook, y un 16 por ciento por Twitter, y que 3 de cada 10 consultados tienen a las redes como un espacio útil para informarse de temas políticos.
Finalmente, se establece que 1 de cada 10 consultados eliminó contactos cuyas opiniones en las redes le molestaban.
Construir democracia es aún un enorme trabajo pendiente.