El economista analizó en la 99.9 la coyuntura que vive el país e incluso el impacto que podría tener las palabras de Cristina Fernández en las últimas horas: “si a todos los problemas que tenemos se le suma el ruido político que genera ella y seguramente la economía que viene muy golpeada se va a desacelerar aún más“.
El país está atravesando una situación económica delicada y el discurso de Cristina Fernández a través de sus redes, no ha traerá justamente tranquilidad para que en algún momento, se empiece a revertir el problema.
El economista Leandro Marcarian hizo su análisis en la 99.9 sobre las consecuencias que podría traer un clima político como el que se está presentando: “si tenemos una vicepresidenta amenazando con parar el país será difícil, los escenarios más tranquilos permiten que la economía se desarrolle mejor. Si esto continúa, a todo los problemas que tenemos se le suma el ruido político que genera ella y seguramente la economía que viene muy golpeada se va a desacelerar aún más”.
Paralelamente, las decisiones que se toman en materia económica tampoco ayudan a que ese escenario mejore: “ahora hay un mayor cepo a las importaciones que tendrá un impacto negativo en la producción, sumado al anuncio de las tarifas, se transforma en un caso donde el gobierno para salvarse a si mismo y saldar sus propias cuentas, está sacrificando al sector privado que termina pagando los costos de una fiesta que no organizó y no la invitaron”.
Para Marcarian queda claro que el último objetivo que tiene el gobierno es que los argentinos mejoren su situación económica, sino que buscan salvarse a si mismos: “si hay algo que había hecho bien la gestión de Macri era firmar un consenso fiscal con todas las provincias donde no sólo se comprometían a bajar el gasto, sino también la alícuota de ingresos brutos bajaría hasta que este año, si eso se mantenía, terminaba desapareciendo. Una de las primeras cosas que hizo Alberto Fernández fue dar de baja ese consenso y permitir que siga Ingresos Brutos. Estos tipos no les importa que vos prosperes, sino recaudar para salvarse ellos con un gasto público innecesario”.
El esquema tributario en Argentina es un verdadero problema que nadie está dispuesto a modificar porque se termina gran parte del financiamiento de un gobierno gigante que ni siquiera con tantos impuestos se puede sostener: “hay una cantidad de impuestos que pagarlos es operativamente difícil. Tenes que bajar los impuestos para que la población haga con su dinero lo que quiera, como mínimo hay que simplificar las cosas. Después hay una discusión más compleja que es la coparticipación. Argentina no puede sostener este sistema porque hay provincias que no generan nada, tienen todo empleo público y viven de la co-participación”.