El abogado constitucionalista habló en la 99.9 sobre la designación de uno de los amigos de Máximo Kirchner y aportante de la campaña de Alicia Kirchner como juez de la Corte provincial cuando ni siquiera está matriculado como abogado.
La designación de Fernando Basanta como juez de la Corte en Santa Cruz, ha generado una fuerte controversia porque se trata de un militante de La Cámpora, amigo de Máximo Kirchner y aportante de campaña de Alicia Kirchner. Ese no es el principal problema, sino que no está ni siquiera matriculado como abogado, un requisito mínimo para el alto cargo que ocupará.
El abogado Constitucionalista Diego Armesto, se refirió al caso a través de la 99.9 indicando que “mayormente las cortes provinciales argentinas tienen a los familiares del gobernador o las amantes, pero siempre se respetaban los requisitos mínimos que te pide la Constitución. Lo que pasó en Santa Cruz es raro pero también es un aportante a la campaña y le están devolviendo un favor, le están pagando la militancia. Uno tiene que tener un límite porque es la Corte, no es el juzgado de paz del barrio; es el juez que integrará el tribunal más alto de una provincia”.
Además, recordó que no es la primera vez que se reinterpreta la ley de manera arbitraria para acomodar tropa propia o bien sacar a los que opinan distinto: “Santa Cruz nos tiene acostumbrados a estas cosas. Kirchner modificó la constitución para sacar en su momento al fiscal Sosa del esquema constitucional. Nada nos puede sorprender en esa provincia. En el caso Sosa destituyeron al fiscal general y cuando la Corte Suprema falló a favor de Sosa, modificaron la Constitución para sacar el cargo. Hay provincias argentinas que viven al margen de la ley, no llegó la democracia y son aconstitucionales”.
Por otro lado, el abogado señaló que Argentina tiene otras necesidades urgentes que están vinculadas a la manera en la cuál se puede ordenar mejor el trabajo para generar más puestos y así terminar con uno de los problemas que parece perpetuarse: “en el 2022 estamos discutiendo convenios laborales del año 70 donde el trabajador del taller no tenía la computadora para hacer un chequeo de problemas. Me llama la atención las cosas que discutimos, porque siempre son el pasado. Nunca pensamos una ley de modernización laboral, hay que ver como funciona en otros lugares del mundo”. Luego agregó: “hay que buscar la manera de generar un mecanismo que genere laburo. Hay que crear exenciones impositivas para el que blanquee trabajadores, que tome más trabajadores y tenga un régimen especial para contratar gente”.