Michel Cohen, el hombre detrás de los cursos de cripto en el Barrio 31: “Hay gente con grandes aptitudes”

Proof of Integrity es un proyecto que busca acortar la brecha tecnológica a través de la enseñanza de blockchain en sectores menos favorecidos de la sociedad. TN Tecno conversó con su fundador e integrantes acerca del funcionamiento, metas y futuro del programa.

Con el objetivo de impulsar y potenciar proyectos que reduzcan la brecha tecnológica y generen oportunidades reales de inclusión y desarrollo, Proof of Integrity es una iniciativa argentina que trabaja para dar conocer los beneficios de la tecnología blockchain a través de la educación y el aprendizaje colaborativo en barrios vulnerables.

“Tenía la idea de generar un proyecto cripto”, cuenta Michel Cohen, fundador de Proof of Integrity, en diálogo con TN Tecno: “En la empresa que dirijo veníamos pensando en armar algo relacionado a blockchain y cuando caí con esta idea, todo me dijeron ‘es por acá’”.

La idea con la que “cayó” Cohen era la usar la tecnología cripto para generar impacto social.

Qué es Proof of Integrity

Proof of Integrity (https://www.proofofintegrity.org/). Es una iniciativa que busca, a través del programa #aPRENDOcripto, dar a conocer y transmitir los beneficios de la tecnología blockchain a comunidades pobres y vulnerables y así generar una sociedad más equitativa, inclusiva y sostenible.

“En el 2020 tuve bastante tiempo, como todos, para pensar. Tenía ganas de hacer cosas nuevas, de hacer algo con impacto social. Primero se me ocurrió armar una plataforma que conecte personas que tengan ganas de ayudar, con personas o familias que les cueste llegar a fin de mes”, relata Michel Cohen sobre el inicio del proyecto.

“En esa época estaba a full el tema de Proof of Humanity, la iniciativa de Santiago Siri y el token UBI de ingreso básico universal. Ahí conecté la idea que había tenido el año anterior con cripto y con todo lo que venía haciendo Santi. Su token UBI es para todos, es universal, pero no hay nada que lo redireccione a la gente que realmente lo necesita. Ese fue el momento que hice el clic. Inmediatamente llegué a la oficina y le escribí a Santi”, expresó Michel: “Le encantó la idea y nos empezó a ayudar a difundirla”.

Ese año, Vitalik Buterin, el creador de Ethereum, vino a Argentina. Santiago Siri, residente en España, también viajó a Buenos Aires y visitó al equipo que Cohen estaba formando: “A raíz de este encuentro con Santi, empezamos a recibir un montón de ofrecimientos de ayuda. Así se empezó a consolidar nuestro equipo, que al principio eran todos voluntarios”.

Luego de ese encuentro, y de conversaciones entre los integrantes del proyecto, Michel y su equipo se dieron cuenta de que había que cambiar la idea original y decidieron enfocarse en quienes más lo necesitan: “Decidimos que primero había que ir a los lugares más urgentes: a los barrios”, contó Cohen a TN Tecno: “Y no podés ir a los barrios sin la pata de educación. O sea, no podés ir a tratar de ayudar a gente a crearse un perfil en Proof of Humanity, sin explicar cómo tener una Wallet o sin enseñar los conceptos básicos, no solo de cripto, sino de finanzas. Entonces ahí la idea empezó a cambiar. De ser un proyecto de ayuda financiera pasó a ser algo mucho más educativo”.

#aPRENDOcripto es el primer programa de formación de Proof of Integrity y consta de un ciclo de cuatro talleres con contenido teórico y práctico donde los participantes aprenden sobre temas de finanzas personales, tecnología blockchain y posibles aplicaciones de uso, mediante el acompañamiento personalizado de tutores para facilitar el aprendizaje.

“Los cursos se hacen una vez por semana en el barrio Padre Mugica, de Retiro”, explicó Tomás Grau Baena, director ejecutivo de Proof of Integrity: “Además, los tutores mantienen una comunicación a través de WhatsApp con los participantes. Por ese medio se proponen consignas para trabajar durante el resto de los días y se responden preguntas”.

La elección del lugar no fue casualidad. Grau Baena cuenta que se dio de manera orgánica: “Cuando Buterin visitó el Barrio 31 -el Barrio Padre Mugica-, mucha gente que quería colaborar con el proyecto ya había trabajado ahí. Así fue que creamos mucha conexión con el barrio y lo más natural fue entonces hacer un primer curso ahí, por los contactos generados. Además, un cura de la Iglesia Católica, el padre Fabián Báez, que también lo conoce a Santi Siri, había participado de la visita de Vitalik, se enganchó mucho con el proyecto. Él nos contactó con el padre Nacho, un cura que está en el Barrio 31, que nos prestó el club Mugica para hacer el curso ahí y así fue como empezamos”.

En los cursos se aprende sobre blockchain y el ecosistema cripto, se muestran sus casos de usos con el objetivo de acortar la brecha tecnológica y generar e incentivar una comunidad cripto en el barrio y de esa manera unir a jóvenes con los mismos intereses. Como se explica en la web de Proof of Integrity, el curso promueve que los participantes interactúen con tecnologías descentralizadas, se les facilita el acceso a la creación de un perfil en PoH, para comenzar a tener un primer contacto con el mundo de las criptomonedas. Y la gente del barrio ya está respondiendo positivamente a la iniciativa.

“La reacción de la gente está siendo muy buena”, cuenta Tomás: “Vemos que encuentran algo útil en los talleres. Hasta ahora, un indicador interesante es que la mayoría de los que los empieza el curso, lo termina. A muchos les interesa tanto el tema de finanzas personales como blockchain”.

Grau Baena afirmó que el interés por los talleres crece cuando los tutores van al barrio: “Nosotros hacemos muchas actividades entre semana, online por WhatsApp, pero cuando más se interesan es cuando estamos presentes en el barrio. Ahí hay un grado de atención y compromiso muy diferente al que percibimos online”.

Diego Gil es responsable de voluntarios en el programa. En conversación con TN Tecno, explicó algunos de los logros que Proof of Integrity ya está empezando a alcanzar: “Desde el programa ya hemos podido conseguir para los chicos becas para otros cursos donde podrán emplear los conocimientos en cripto ya aprendieron en los talleres. Además, también estamos arrancando con becas para aprender a programar”.

Gil destacó el interés de los participantes en aprender a programar y a conocer nuevas tecnologías: “Muchos jóvenes que llegan a nuestro taller tienen aptitudes ideales para seguir la programación, el diseño gráfico y todo lo relacionado con la tecnología. Si bien estamos todavía en una etapa inicial ya empezamos a ver los resultados que nos irán permitiendo establecer una suerte de círculo virtuoso que irá conectando a los chicos con oportunidades académicas y laborales”.

Para finalizar, desde Proof of Integrity afirmaron que la idea es seguir con los cursos y extenderlos a otras zonas. El próximo será en Villa Lugano y a partir de entonces el proyecto se expandirá a otros barrios populares de la Ciudad de Buenos Aires, la Argentina y posteriormente en la región.