Roberto Carlés mostró su enojo en Twitter sin nombrarlo. “No pidió quedarse una noche, sino nueve”, afirmó. Y lo acusó de enviarle “mensajes insultantes” por negarle la estadía.
La Embajada argentina en Roma se vio envuelta en un fuerte escándalo este lunes, por las quejas de su titular, Roberto Carlés, contra “personas” que intentaron alojarse en la residencia diplomática que él ocupa y a las que les negó la estadía.
Carlés, embajador político del gobierno de Alberto Fernández y amigo de la vicepresidenta Cristina Kirchner y del papa Francisco, sorprendió hace unas horas con dos tuits que revolucionaron la Cancillería.
“Lamentable que haya personas que se crean con derecho a alojarse en una embajada, por su currículum o por tener un cargo público y, peor aún, que se ofendan y envíen mensajes insultantes si se les informa que no hay habitaciones disponibles (ocupadas por mi propia familia)”, escribió primero.
Luego afirmó, misterioso: “No daré jamás el nombre, pero lo comento sobre todo porque me impactó la violencia de su mensaje. Tanto se ofendió que decidió cancelar su participación en una actividad por el 24 de marzo, demostrando su real compromiso. Por cierto, no pidió quedarse una noche sino nueve“.
Clarín pudo saber de muy altas fuentes que la persona a la que se refiere Carlés es el intelectual, periodista y escritor kirchnerista Mempo Giardinelli.
En Buenos Aires contaron que si bien Carlés no fue muy “diplomático” al publicar esos tuits, su enojo surgió de una invitación que tenía el periodista y escritor para presentar en Italia la película “Argentina, 1985”.
Giardinelli, siempre según la información obtenida por Clarín, respondió que iba solo si lo alojaban en la señorial residencia argentina donde vive Carlés con su familia y sus dos hijos.
La embajada argentina y residencia está en la Plaza Esquilino. Es un edificio muy señorial que requiere una importante reparación de su estructura, como muchas sedes argentinas en el exterior, fruto de un deterioro de décadas y falta de presupuesto.
La residencia cuenta con un ala de habitaciones separadas de la familia que muchos embajadores usaron para ayudar a artistas. Carlés.no tiene este hábito con todos. Afirman en su entorno que exige que sus eventuales huéspedes tengan una presentación oficial justificada en la capital italiana.
A los funcionarios por lo general sí se los debe alojar ahí.
Abogado penalista, Roberto Carlés fue el preferido de Cristina Kirchner para reemplazara a Raúl Zaffaroni en la Corte Suprema, cuando este último renunció al máximo tribunal del país. Sin embargo en su momento la oposición lo volteó.
Corría el año 2015, fin de la segunda administración de Fernández de Kirchner, y entonces el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal (CPACF) amenazó con impugnar esa candidatura.
Giardinelli, con quien Clarín no pudo hablar, es un escritor y periodista, ganador del premio Rómulo Gallegos, de 1993.
Devino militante ultra kirchnerista desde 2003 al punto que se convirtió en un panelista de 6,7,8, tribuna televisiva que atacaba a los periodistas.
En julio de 2020 publicó una lapidaria carta contra Alberto Fernández.
“Es alarmante que usted no se dé cuenta del verdadero y calamitoso estado de millones de ciudadanos”, lo reprendió al Presidente. Además, aseguró que había “un golpe de Estado” en marcha y que temía que volvieran “las ‘desapariciones’ de personas, los secuestros de niños y demás bestialidades”.
“Por momentos resulta chocante la Argentina que usted describe como una en la que ahora se destaca una ‘reactivación’”, escribió Giardinelli con estilo dilo.