La acusación fue presentada por el fiscal especial Jack Smith, quien determinó que el ataque al Capitolio el 6 de enero de 2021 fue promovido por las “mentiras” del ex presidente de Estados Unidos. El asalto al Congreso y los papeles clasificados hallados en su mansión de Mar-a-Lago, las otras causas que deberá afrontar.
El magnate republicano está acusado de cuatro cargos en la acusación de 45 páginas presentada por el fiscal especial Jack Smith. Según el escrito judicial, un gran jurado de Washington DC lo acusó formalmente de conspiración para defraudar a Estados Unidos, conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra derechos.
“Este no es sino otro capítulo corrupto en el patético intento de la familia criminal de Biden y su títere Departamento de Justicia para interferir en las elecciones presidenciales de 2024″, reaccionó en un comunicado el equipo de su campaña electoral en la red social Truth Social.
Según Smith, el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 por parte de simpatizantes de Trump fue “alimentado por mentiras” destinadas a obstruir la certificación de la victoria electoral de su rival demócrata Joe Biden.
El 6 de enero de 2021, Trump pronunció un discurso frente a sus simpatizantes congregados cerca de la Casa Blanca, instándolos a “luchar como demonios” contra los resultados de las elecciones presidenciales que iban a ser certificados en el Capitolio. Miles de simpatizantes del ex mandatario finalmente atacaron el Capitolio en Washington.
“La finalidad de la conspiración era invertir los resultados legítimos de las elecciones presidenciales de 2020 mediante afirmaciones falsas deliberadas de fraude electoral”, sostiene la acusación.
Trump, que ya se había convertido en el primer expresidente estadounidense que enfrentaba cargos penales, afirma, sin pruebas, que le “robaron” las elecciones de 2020, que ganó el demócrata Joe Biden, su posible rival de cara a los comicios de 2024. Incluso, funcionarios han testificado que el ex jefe de Estado republicano los presionó basándose en falsas afirmaciones de fraude electoral generalizado.
El pasado 18 de julio, el ex presidente norteamericano dijo que había recibido una carta de Smith en la que le comunicaba que era objeto de la investigación del gran jurado por lo ocurrido el 6 de enero en Washington.
Actualmente Trump es el candidato favorito, según los sondeos, para hacerse con la nominación republicana para las elecciones presidenciales de 2024. Una nueva imputación contra él, no obstante, no impediría que el ex mandatario concurriera a los comicios.
Smith, designado como fiscal especial del Departamento de Justicia, está al frente de la investigación a Trump por su implicación en el asalto al Capitolio de 2021 y los papeles clasificados hallados en su mansión de Mar-a-Lago. “Mi equipo buscará que se celebre un juicio rápido para que nuestras pruebas puedan ser probadas ante un tribunal y juzgadas por un jurado de ciudadanos”, dijo el fiscal este martes en una breve comparecencia ante la prensa.
Por esa segunda causa, en Florida, Trump se ha declarado no culpable de 37 cargos criminales por haberse llevado a su mansión en Florida cajas llenas de documentos clasificados cuando dejó la Casa Blanca en enero de 2021. Los fiscales le acusaron de poner en peligro algunos de los secretos de seguridad nacional más sensibles de Estados Unidos.
El jueves, los fiscales añadieron tres cargos penales más contra el presidente norteamericano, elevando el total a 40, acusándolo de ordenar a empleados que borraran videos de seguridad mientras era investigado por retener los documentos.
Además, el ex presidente fue imputado en marzo en Nueva York por el presunto pago ilegal a la actriz porno Stormy Daniels durante la campaña electoral de 2016 a cambio de su silencio sobre el “affaire” que mantuvieron diez años antes. En abril, el magnate se declaró inocente de los 34 cargos de delitos graves.
Por su parte, tiene abierta otra causa en Georgia sobre sus esfuerzos para anular la victoria de Biden en ese estado sureño en las presidenciales de 2020.
Trump, de 77 años, perdió las elecciones de 2020 ante Biden, pero no admitió el resultado de la votación, denunció un falso fraude electoral y presionó a funcionarios para que revirtieran el resultado. Asimismo, ha tratado de presentar las acusaciones en su contra como parte de una caza de brujas con motivaciones políticas.