Joven iraní Armita Garawand fallece tras un mes en coma

Armita Garawand, que estaba en terapia intensiva desde el 1 de octubre, habría sido agredida por agentes de la policía de la moral, quienes la habrían empujado y al caer, golpeó la cabeza. El gobierno lo desmiente.

La adolescente iraní Armita Garawand, que quedó en coma tras un controvertido incidente en el metro de Teherán, falleció este sábado (28.10.2023) después de un mes hospitalizada, según un medio local.

“Armita Garawand, una alumna de Teherán, falleció hace una hora tras un tratamiento médico intensivo y 28 días de hospitalización en la unidad de cuidados especiales”, anunció la agencia de prensa Borna, dependiente del ministerio de Juventud y Deportes.

La joven, de 17 años y originaria de una región kurda, estaba hospitalizada en el hospital Fajr de Teherán desde el 1 de octubre, tras desmayarse en el metro de la capital. Las circunstancias del incidente siguen siendo objeto de controversia.

Según varias oenegés, la adolescente resultó herida de gravedad a raíz de una “agresión” a manos de los miembros de la policía de la moral, encargados de vigilar la obligación de las mujeres iraníes de cubrirse en público la cabeza con un velo.

Teherán niega responsabilidad

Las autoridades en cambio afirmaron que la adolescente sufrió una “caída de tensión”, y negaron todo “altercado verbal o físico” entre ella y los pasajeros o responsables del metro de Teherán.

El sábado, la agencia local Tasnim citó fuentes médicas afirmando que la joven “sufrió una caída que le causó una lesión cerebral, seguida de convulsiones continuas, una disminución de la oxigenación cerebral y un edema cerebral”.

El caso se produjo algo más de un año después del fallecimiento bajo custodia policial, el 16 de septiembre de 2022, de Jina Mahsa Amini. La joven, de 22 años y de origen kurdo, había sido detenida por incumplir supuestamente el estricto código de vestimenta impuesto a las mujeres en Irán.

Su muerte en detención desató un amplio movimiento de protestas en el país que dejó cientos de muertos, incluyendo miembros de la fuerzas de seguridad, y provocó la detención de miles de personas.