La abogada habló en la 99.9 sobre el cambio que espera que pueda generar el nuevo Ministro de Justicia de la Nación en la forma en que la justicia se ha metido constantemente en las causas donde había políticos implicados.
La asunción de un nuevo gobierno siempre trae expectativas renovadas e ilusiones. En el ámbito de la justicia, tan bastardeado por el kirchnerismo, asumirá su cargo Mariano Cúneo Libarona y ante esta situación, algunas de las personas que llevan muchos años en el sistema judicial, sienten que puede haber un aire distinto.
Así lo indicó en la 99.9 la abogada Marta Nercellas, quien señaló que “hemos naturalizado, casi como si no fuera un gravísimo defecto de la República, que las causas que tienen algo que ver con la política y la rozan de alguna manera o imputan a una persona con poder político, fueran manejadas como una negociación: cuanto mayor poder tiene la persona imputada, menores posibilidades tenemos de que se llegue a la verdad. Ni siquiera hablo de la consecuencia punitiva, sino que podamos saber lo que realmente sucedió”.
Esa forma de funcionar se extendió a lo largo de las últimas décadas y desde su experiencia, la letrada considera que eso podría cambiar: “a los operadores de la justicia, nos causa mucha desazón. La sola manifestación de un designado ministro de Justicia que es una persona que conoce muy bien esos pasillos, me llena de ilusión porque conoce quienes son, saben donde y como operan. Estoy esperando con esperanza la nueva gestión”.
También se refirió Nercellas a la tarea que desarrolló el ministro saliente Martín Soria: “fue una vergüenza como Ministro de Justicia porque no sabe lo que significa esa palabra. Ojalá hubiera sido sólo ineficiente, procuró intervenir donde no debía. Desde insultar a los Ministros de la Corte que son la cabeza del tercer poder, el que debe ponerle un contrapeso a los otros poderes. Lo menos que hizo Soria fue malgastar el dinero público en su autosatisfacción, le hizo mucho daño a la justicia”.
Por último señaló a uno de sus laderos, el Secretario de Justicia Juan Martín Mena: “en rigor de verdad, el Dr. Mena, su segundo, era el que más operaba. Son personajes que intentaron influir todo lo que pudieron en las decisiones judiciales. Muchas veces con poco éxito porque por suerte son ineficaces, sino hubieran hecho un daño mayor”.