Asunción y asistencia. La asunción de la fórmula Milei – Villarruel trae a la Argentina a mandatarios y dirigentes de 137 países. El rey de España, los líderes políticos de VOX, Bolsonaro padre e hijo o la muy polémica congresista María Elvira Salazar, de origen cubano y archienemiga de los regímenes de Venezuela, Nicaragua y Bolivia, gobiernos a los que ve como la tríada de los gobiernos chino e iraní en Sudamérica. Desde Buenos Aires, a donde llegó hace ya tres días, Salazar twittea a diario sobre la asunción del presidente electo y su alta significación para el continente.
Cambios y entreveros. A poco de conocerse que Javier Gastón Milei ganó la elección para presidir la nación, el primero a salir al cruce fue el pope de La Bancaria, el mendocino y kuka Sergio Palazzo. En declaraciones a un medio porteño, el sindicalista señaló:«No veo la misma situación que cuando ganó Macri en el movimiento obrero, veo una firme decisión de sostener esos 15 puntos y no dar un paso atrás. Me imagino que, si pretenden avanzar, la respuesta gremial será global». Debe decirse que es muy imaginativo, ya que nadie se decantó por apoyar sus palabras desde el movimiento obrero. A Palazzo no le preocupan los trabajadores, le inquieta su impunidad.
Impunidad al palo I. Como bien sabe Carlos Melconián, nada ocurre en el Nación sin la bendición de Sergio Palazzo, a punto que hay una doble llave en estudio de las nuevas autoridades del BCRA. El primer escándalo, es que han hecho un desparramo de tarjetas a beneficiarios de planes sociales que involucran el uso de recursos del banco por el orden de los $30 mil millones, destinados a 300.000 cuentas entregadas bajo el estándar a mínimos escandalosos. Escenas del saqueo.
Impunidad al palo II. El otro escándalo —choreo, para ser claros— que impacta en la línea que reporta a Sergio Palazzo es la desaparición, el martes de la semana previa a la segunda vuelta, de una saca con $25 millones de un blindado del banco. El sitio SL 24 señala: «El camión en cuestión era conducido por S.B. por Paseo Colón mano al Sur y a la altura de la Autopista 25 de Mayo. Es un breve trecho que se recorre y sin cámaras que puedan acreditar la escena. Nadie entiende cómo, a menos que sea deliberado, que se le haya “caído” una bolsa con $ 25.000.000.- que fue recogida inmediatamente por un taxi sin patente que iba detrás. Tres cuadras más tarde “se dieron cuenta”, cuando un automovilista les dio aviso, dicen. Entre muchas casualidades, ocurre en la semana previa al balotaje presidencial». El sobrepeso ejerce presión en la puerta trasera. Ya ha pasado que, en el ascenso de la rampa de salida interna de casa central, se cayeran bolsas debido al exceso de carga y la inclinada rampa interna de ascenso.
Conjeturas que impactan. En el orden de las conjeturas, un saco con $25.000.000 en billetes de $ 1.000 pesa 25 kg, como una bolsa de cemento. Con billetes de $ 2.000, es la mitad de la carga. También puede tratarse de una combinación de ambas modalidades, promediando el peso. Cabe imaginar la escena del taxista y la pericia necesaria para levantar la bolsa en rápida coordinación, a la vista.
Más irregularidades. De S.B., muchas fuentes aseguran de su idoneidad y carácter de hombre de familia, sin problemas con ningún compañero. Solamente cometió el error de facilitarle su tarjeta corporativa de gastos a Juan Manuel Romero, gerente de banca privada del BN, quien la utilizó por fuera de la responsabilidad asignada, por lo que se ganó un sumario. Vale recordar que Romero es el novio de Carmen Barros, la gerente numeróloga. Escenas del final.