El conflicto entre estos dos territorios se mantiene latente desde 1992, cuando se enfrentaron en armas.
La región separatista moldava de Transnistria pidió este miércoles ayuda a Moscú mediante una resolución aprobada por los diputados locales señala que se “solicita al Consejo de la Federación y la Duma Estatal rusa implementar medidas para proteger a Transnistria en medio del aumento de las presiones de Moldavia”.
El documento recuerda que “más de 220.000 ciudadanos rusos” viven en Transnistria de forma permanente. Además, hace hincapié en la “experiencia única y positiva del contingente de paz” ruso en esta región, así como el estatus de Moscú como “garante y mediador en el proceso de negociaciones” con Moldavia.
Transnistria, territorio de apenas medio millón de habitantes, en su mayoría eslavos (rusos y ucranianos), rompió los lazos con Moldavia tras un conflicto armado en 1992 en el que contó con ayuda rusa. Desde el final de aquella contienda, Moldavia aboga por la integración de los dos territorios, divididos por el río Dniéster, a lo que siempre se han negado los separatistas con el apoyo de Moscú.
En virtud del Acuerdo para la Solución Pacífica del conflicto de Transnistria firmado en julio de 1992, Rusia desplegó a 2.400 efectivos para garantizar la paz en la zona, pero fue reduciendo este contingente a lo largo de los años. Moldavia exige la retirada de las tropas rusas de la región, así como del arsenal soviético en la misma.