El analista internacional se refirió a lo que se dio a conocer el pasado viernes donde Burford Capital pide que les transfieran el 51% de las acciones de YPF ante el incumplimiento del Estado Nacional.
El pasado viernes, la jueza Loretta Preska levantó el secreto del sumario en una presentación que hizo Burford Capital para que le transfieran el 51% de las acciones de YPF ante el incumplimiento del estado argentino.
Esta presentación se había hecho en abril y es muy importante en el contexto político actual, aunque no tuvo la repercusión que debería tener. El analista internacional Sebastián Maril, habló al respecto en la 99.9 advirtiendo que “me sorprende que no hubiera ruido sobre esto excepto los titulares del viernes a la tarde y el sábado a la mañana. Es necesario prestarle atención porque es una bola de nieve que sigue creciendo. Como Argentina no le presta atención, no nos sentamos a negociar; entonces piden a la jueza Preska lo que legalmente están autorizados a pedir. Eso es que les transfieran el 51% de las acciones de YPF porque Argentina no está pagando”.
Después de que se diera a conocer este tema, se debería haber llegado a una explicitación del gobierno sobre el tema, pero hubo silencio absoluto: “acto siguiente, esperaba algún tipo de comentario de YPF o del gobierno, pero no ocurrió. YPF está obligado a reportar esto en el ente regulador de mercados tanto de Argentina como de Estados Unidos por lo que tendrá que presentar un comunicado en ambas bolsas”.
Maril también fue muy claro sobre las posibilidades de que esas acciones se transfieran efectivamente y señaló que es casi imposible: “la ley de expropiación impide el gobierno argentino transferir las acciones de propiedad del estado sin que dos tercios del Congreso lo apruebe. Lo que quiere Burford es hacer ruido y se sienten a negociar. La jueza Preska ordenará el traspaso de las acciones y si Argentina no lo hace, empieza el desacato que no escuchamos desde el 2014. Milei está apuntando a Estados Unidos para todo lo que pretende para el país, pero un país que no cumple con una corte norteamericana, entra en desacato y es políticamente grave. Tienen que prestarle atención”.
Para el especialista, no es un tema menor porque empezarán a llegar situaciones similares a futuro: “esto es el comienzo, se vienen más pedidos de embargo, traspaso de titularidad o como quieran llamarlo. El problema que tenemos los argentinos, es que no actuamos hasta que tenemos el problema en nuestras narices y cuando lo tenemos, le echamos la culpa al gobierno anterior, al clima o lo que sea. Evitamos enfrentar los problemas serios que tenemos y caemos en problemas aún más complejos aún”.
Por último, Maril indicó que es un problema demasiado complejo como para dejarlo pasar sin tomar un rol activo por parte del Estado: “la expropiación de YPF es lo más complejo que Argentina afronta en la historia. Son 16 mil millones de dólares por un error cometido no sólo por un gobierno, sino por todo un Congreso que votó sin leer lo que estaba aprobando”.