Agentes con equipos antidisturbios ingresaron a la casa de estudios para dispersar la protesta; varias personas fueron detenidas acusadas de alteración del orden público.
Media centena de agente del Departamento de Policía de Nueva York ingresaron este martes al campus de la Universidad de Columbia, según informó el diario local The New York Times, para desalojar a una numerosa cantidad de manifestantes propalestina que amenazaban con acampar y tomar un edificio del centro de estudios. La Policía detuvo al menos a 50 personas, en medio de disturbios que se replicaron en otros centros educativos a lo largo de Estados Unidos.
A pesar de las advertencias, tanto de la universidad como de las autoridades del estado de Nueva York, los manifestantes -entre ellos estudiantes universitarios- no abandonaron el campus y continuaron con la protestas. Fue entonces que la cúpula directiva de Columbia, tras un par de días frenéticos, le pidió mediante una carta al Departamento de Policía que despejara el establecimiento. La Policía permanecerá en el campus hasta al menos el 17 de mayo.
A través de diferentes videos que se difundieron en redes sociales se mostró el amplio despliegue de agentes con equipos antidisturbios que rodearon el predio de la alta casa de estudios, una de las más prestigiosas del país. “Lo estamos desalojando”, gritaban los oficiales mientras marchaban hacia la entrada atrincherada del Hamilton Hall.
“Tomamos la decisión, temprano en la mañana, de que se trataba de un asunto policial y que la policía de Nueva York estaba en la mejor posición para determinar y ejecutar una respuesta adecuada”, dijo la universidad en un comunicado.
Con la utilización de esposas con cierres de cremallera la Policía esposó a los manifestantes y se los llevó detenidos. “Dos agentes levantaron a una mujer del suelo por los brazos. Los manifestantes sacaron sus teléfonos para grabar y gritaron ‘Vergüenza’ mientras lo hacían”, informo The New York Times. Todavía no trascendieron cifras oficiales.
Se vio a una larga hilera de agentes de policía entrar en el edificio por una ventana del segundo piso, utilizando un vehículo con una escalera para acceder a la planta superior.
En ese sentido, se supo que los agentes desalojaron a los manifestantes y a los periodistas que se encontraban en las inmediaciones de Hamilton Hall.
Diferentes videos mostraban a los estudiantes parados en fila con los brazos cruzados en la puerta de Columbia en West 116th Street mientras los oficiales se acercaban a ellos.
Días atrás, los estudiantes y manifestantes habían instalado un campamento el cual fue desmantelado por la Policía, sin embargo en las últimas horas se retomó el acampe pero dentro del campus universitario. En aquella ocasión, el 18 de abril, el desalojo terminó con la detención de más de 100 personas.
Las protestas de los manifestantes propalestina intentan expresar su oposición a la ofensiva israelí en Gaza y exigen que la universidad desinvierta en empresas que, afirman, se están beneficiando del conflicto.
Las protestas se han extendido a campus de diversas partes del país mientras se acercan las ceremonias de graduación de mayo, lo que ha aumentado la presión sobre las casas de altos estudios para que desalojen a los manifestantes.
“Los miembros de la comunidad de Columbia retomaron el Hall Hamilton después de medianoche”, dijo el grupo de estudiantes Columbia University Apartheid Divest (CUAD) en un comunicado publicado en X.
“Ocupar un edificio es un pequeño riesgo comparado con la resistencia diaria de los palestinos en Gaza”, afirmaban. Asimismo, mencionaron que el edificio fue renombrado Hind Hall en honor a una niña de seis años que murió durante la guerra en el territorio palestino.
El Hamilton Hall abrió sus puertas en 1907 y lleva el nombre de Alexander Hamilton, uno de los padres fundadores de Estados Unidos, que asistió al King’s College, el nombre original de Columbia.
Por otro lado, la emisora de radio estudiantil WKCR-FM cubrió paso a paso la toma del edificio, ocurrida unas 12 horas después del plazo límite de las 14 del lunes para que los manifestantes abandonaran un campamento de unas 120 carpas bajo amenaza de suspensión. Poco más de 24 horas después se dio inicio al desalojo.
Amenaza de expulsión y el fundamento de la protesta
En un comunicado el martes, el portavoz de Columbia, Ben Chang, dijo que “los estudiantes que ocupen el edificio se enfrentan a la expulsión”. Agregó que aquellos que no aceptaran los términos del lunes serían suspendidos.
“Los manifestantes han optado por escalar a una situación insostenible: destrozar propiedades, romper puertas y ventanas y bloquear entradas, y estamos aplicando las consecuencias que describimos ayer”, agregó.
El jefe del Departamento de Policía de Nueva York, Jeffrey Maddrey, dijo en una conferencia de prensa el martes que la policía no iba a ingresar al campus de Columbia sin una solicitud de la administración de la universidad o sin una emergencia inminente. Sin embargo esto cambió con el correr de las horas.
En su publicación en X, los manifestantes dijeron que tenían previsto quedarse en el edificio hasta que la universidad aceptara las tres demandas de CUAD: desinversión, transparencia financiera y amnistía. “No nos moveremos hasta que Columbia satisfaga nuestras demandas o (…) nos muevan por la fuerza”, dijo la líder estudiantil Sueda Polat, en una rueda de prensa.
En tanto, la universidad había anunciado el lunes que empezaría a suspender a estudiantes que no hayan depuesto la protesta. “A los que aceptaron marcharse y firmaron un documento comprometiéndose a cumplir las políticas de la universidad se les permitirá completar el semestre”, recordó Ben Chang, vicepresidente de comunicaciones del centro en un comunicado.
“Estas tácticas repulsivas de miedo (que) no significan nada comparadas con la muerte de más de 34.000 palestinos”, respondieron.