La Diputada Nacional habló en la 99.9 sobre el entredicho que tuvo en una de las comisiones con Fernando Iglesias, llamandolo “cagón”: “no me enorgullezco porque no es mi estilo”.
En el contexto de la Comisión de Derechos Humanos y Garantías, durante el tratamiento del proyecto de ley que buscar declarar el 20 de marzo Día de Duelo nacional, en el marco de lo que fue la cuarentena establecida por la pandemia; la diputada Mónica Frade llamó “cagón” a Fernando Iglesias en un hecho que tuvo muchas repercusiones.
La propia legisladora se refirió al hecho a través de la 99.9: “no me gustó, no me enorgullezco, no es mi estilo, nunca insulté a nadie en los cinco años que estoy en el Congreso, pero Fernando es un provocador casi compulsivo. Cuando hablan los diputados sistemáticamente fuera de micrófono, él interrumpe y chicanea. Lo vengo viendo desde siempre, pero es como que está, quizá por un paraguas presidencial que tiene ese estilo, un poco más acentuado esto. Fuera de micrófono mirándonos, justo lo miré y dijo una frase muy fea y yo como que vengo acumulando y estábamos escuchando a las víctimas de pandemia, un tema serio que conmueve. Cuando me toca la palabra a mí, empiezo a hablar de los desastres de la cuarentena de Alberto, hago un paréntesis ahí y digo bueno, en ese momento pensemos que casi era un prócer Alberto Fernández por esos días y dije que todas las tardes teníamos que escuchar cómo nos daban clase con todos los ministros de salud, había un consenso y ahí él empezó, fuera de micrófono, a hacerme gestos y a decir cosas”.
La reacción fue entonces decirle esas palabras casi como una catarsis, harta del modus operandi de su par: “la verdad que exploté. Yo respeto la palabra de todos y confieso que muchas veces sobre todo me pasaba cuando hablaba Kirchner, yo me iba del recinto. Hoy en día habla Tailhade y yo me voy del recinto porque no puedo soportar, me hace mal que hablen de ciertas cosas sin ninguna autoridad moral y siendo responsables de muchas de las cosas de esta actualidad. Es eso lo que me pasó. No es bueno porque estamos en una época donde justamente yo critico esa virulencia de palabra que derrama desde el presidente hacia abajo, pero bueno, me pasó eso y yo lo que quisiera es que él reflexione porque la palabra de todos vale tanto como la de él”.
Justamente sobre la virulencia en los discursos políticos, Frade agregó que “a Milei en campaña le fue muy bien con eso, pero me parece que tiene una lengua cotidianamente procaz, sus gestos son obscenos y no es ese el modelo. Hay un mínimo de cosas y de respeto que hay que mantener y sobre todo en ciertos lugares. Yo hay cosas que no digo, quizá por mi lugar de diputada hoy y que, si no lo fuera, lo diría”.
Para Frade lo más preocupante es la postura que está tomando la oposición, más allá de las formas para expresar las ideas: “en este momento, me preocupa una oposición absolutamente atomizada, transversalmente atomizada, porque los escenarios pueden ser buenos, más o menos, muy buenos, malos, pero en cualquier caso una oposición seria, responsable, sostenida y fortalecida siempre ayuda a que el país mejore”.