La fibra de guanaco requerida por el mercado textil argentino y del exterior

Se encuentra en desarrollo una metodología de aprovechamiento sustentable de la lana de guanaco que se está vendiendo a 200 dólares el kilo y el investigador del CONICET, Pablo Carmanchahi, al frente del proyecto explica que “los animales que son silvestres, se los captura una vez por año, se los esquila con protocolos de buenas prácticas de manejo, teniendo muy en cuenta el bienestar de los animales y de los operarios que hacen este trabajo, y luego se los libera”.

“Esta iniciativa ha despertado desde hace mucho tiempo, muchísimo interés por parte de algunas textiles argentinas principalmente, pero también ahora mucho interés de textiles de afuera, compradores de hilos de este tipo de fibra, que son fibras de lujo, son muy finas. La fibra de guanaco es muy similar a la fibra de vicuña, que es mucho más conocida, solamente hay una diferencia de dos micrones entre una fibra y la otra, con lo cual estamos hablando de fibras de altísima calidad”, describió Carmanchahi.

Desde el año 2013 se ha instalado una planta de procesamiento textil en colaboración con una cooperativa de pobladores rurales que viven en el sur de Mendoza. Es una de las pocas plantas en Argentina que procesa fibra de guanaco. Y lo que tiene de interesante este proyecto es que se generó un polo de desarrollo socioeconómico local porque se instaló la planta al costado de la reserva provincial La Payunia, en el sur de Mendoza. Es una zona muy árida donde hay muchísimos guanacos, con lo cual lo que hicieron con los pobladores de esa reserva, fue desarrollar en conjunto la metodología de la captura y esquila de los animales. En el 2013 con un proyecto financiado por la Nación, instalaron una planta de procesamiento textil, que le dan trabajo a toda la gente que forma parte de la cooperativa y que no solamente procesa la fibra de guanaco que ellos producen, sino también fibra de otros animales, como por ejemplo de vicuñas.