La ex vicepresidenta de la UIF habló en la 99.9 sobre el nombramiento por decreto de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla como jueces de la Corte Suprema.
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El Gobierno nombró por decreto a Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla como jueces de la Corte Suprema generando una fuerte reacción de aquellos que vienen denunciando, sobre todo por Lijo, que se trata de un acuerdo político.
La ex vicepresidenta de la UIF, María Eugenia Talerico, habló en la 99.9 sobre lo que esto representa para la confianza en el país que de alguna manera quiere construir Javier Milei: «Lo de Lijo obviamente era muy esperable, juega a dos puntas y está intentando pedir una licencia cuando debería renunciar. Vamos viendo las triquiñuelas que ya se deben haber negociado para que esto sea así. Tengo la sensación de que el entorno del gobierno insiste en rodearse de lo peor que tiene Argentina, y que esto nos coloca a todos nosotros, que estamos haciendo un gran esfuerzo y obviamente tenemos esta tranquilidad enorme que da la baja de la inflación y que nos anestesia, para que mientras tanto estemos con un entorno más propio de un casino que de una Nación. Argentina necesita tener certidumbre, confianza y no volver a tener la inestabilidad que tiene, que no haya acuerdo y que no haya diálogo sobre lo que está pasando».
Para Talerico, en este tema está en juego la forma en que los argentinos votaron un cambio y que lleva a desconfiar nuevamente de la política: «hay un modo de gobernar que la Argentina necesita, que sin duda es con muchísima severidad y no transar con todas las limitaciones que te empiezan a poner los políticos que quieren conservar las cajas. Eso genera muchas limitaciones en la acción política. Necesitas mucha determinación y no llegar con todos esos muertos en el placard. Ahora, después hay muchos condicionamientos de todos que en el fondo aprovecha el presidente, porque te apura con lo de las universidades y te empieza a sacar todos los trapitos sucios que hace años todo el mundo sabe que se vienen acumulando y logra que retrocedan y negocia como él quiere. Hay un gran aprovechamiento. Los orina de arriba del Obelisco, pero porque obviamente son muy vulnerables. Hay mucha vulnerabilidad en la clase política y eso lo está aprovechando Milei. Lo que pasa es que ahora el propio presidente se está transformando en parte de esa Argentina sucia, complicada, enredada, porque como yo digo, ficha limpia es una de las grandes cartas de negociación de este gobierno y nosotros queremos a los corruptos fuera de la política».
Para la ex funcionaria es clave entender hacia donde quieren ir los argentinos y darse cuenta que este tipo de acciones del presidente, van en el sentido opuesto: «En la Argentina hay un cambio de conciencia, la gente no quiere más de lo mismo y por eso vino Javier Milei. Y hay que ver cómo se renuevan los liderazgos con determinación para dejar esta Argentina vieja atrás. Es como una transformación la que estamos teniendo. La anestesia es parar la inflación porque hay una sensación de mayor tranquilidad, estabilidad, de que Milei lo hizo, pero tenemos que saber que el entorno de gobierno no genera las condiciones para que esto sea perdurable, porque se están rodeando de lo peor que tiene la Argentina».