La investigadora marplatense Victoria Guglielmotti habló en la 99.9 sobre la beca «Marie Sklodowska-Curie» que recibió por su labor de investigación.
Una vez más, los científicos marplatenses son premiados por sus tareas e investigaciones. Victoria Guglielmotti, es una de ellas y recibió la beca «Marie Sklodowska-Curie» por su labor en la investigación de aspectos aún desconocidos sobre la migración celular.
En diálogo con la 99.9 desde Europa, explicó que «lo que buscamos estudiar en el proyecto es qué efectos de memoria puede llegar a tener la migración celular. Es decir, si la célula en sí, como entidad, tiene algún tipo de registro de los lugares por los que ya migró previamente».
Los objetivos de su investigación serán aplicables en distintos campos: «Estamos queriendo ver, qué son esas señales químicas que las células dejan en su paso y que le dictan los lugares por los que ya estuvo pasando, por los que ya migró. Por otro lado, la migración celular es un aspecto clave en muchísimos procesos biológicos, ya sea desde el desarrollo embrionario, desde la influencia que puede tener en muchísimas enfermedades, como por ejemplo cáncer, etc».
En lo particular, el proceso que investigan tiene que ver con interpretar los procesos de estas modificaciones: «ayuda a entender a la célula como entidad, porque lo que se vio y lo que ya se reportó es que una célula cuando se adhiere a un sustrato o a la matriz extracelular dentro del cuerpo, deja señales químicas a su paso que le dicen si ya estuvo o no en ese lugar, y de esa manera responde de formas distintas. Entonces la célula no tiene los mismos mecanismos que nosotros a nivel sistema nervioso, pero de alguna forma detecta estas señales químicas que ella misma deja en su paso y le hacen saber si tiene o no un efecto de memoria».
Con la beca que ha ganado, podrá tener un estudio más profundo y además sostener su trabajo en el tiempo: «esta beca es en realidad para financiar mi postdoctorado. Entonces van a permitir que el proyecto en el que estamos trabajando se pueda desarrollar a lo largo de dos años. Y no es solamente una beca para mi postdoc, sino que además contempla fondos para movilidad, para que se se pueda hacer difusión de esta propia investigación, ir a congresos, empezar a colaborar con distintos laboratorios que estén trabajando en el tema, para también darle la oportunidad a investigadores e investigadoras jóvenes de que empiecen a crear su propia red de contactos científicos».
Ahora, trabajando durante dos años en Alemania tendrá la oportunidad de seguir creciendo en el campo que decidió investigar donde evidentemente, va por buen camino.