Eduardo Jacobs: «Es muy bajo nuestro nivel de política, pero ya es un dato de la sociedad civil también»

El economista se refirió en la 99.9 a la necesidad de dar un debate profundo y argumentado sobre las tres reformas que necesita el país.

La economía argentina, en términos macro, tiene un destino muy concreto e incluso está marchando de buena manera. Sin embargo, el economista Eduardo Jacobs ha propuesto que se discuta de manera profunda las reformas que necesita el país para mejorar muchas cuestiones que hoy están funcionando mal.

En diálogo con la 99.9, el especialista explicó que «es unánime la voz que dice que hace falta la reforma laboral, tributaria y previsional. Ahora, yo no estoy en un mismo plano de igualdad que el PRO, por ejemplo, que la Fundación Pensar que salió a decir esto, ni de lo que es la Fundación Mediterránea, ni el Cipec. No hay un ánimo de la sociedad civil de empezar a discutir estas cosas en profundidad. No tenés gente idónea a cargo de los lugares. No está el Estado, está vacío, es una caja vacía que se ha deteriorado en los últimos 20 años. Los gobiernos kirchneristas ayudaron, pusieron una cantidad de militantes rentados que no sabían ni leer ni escribir, pero el propio deterioro del estado ha llevado a que la gente abandone el estado. No hay gente que sepa dentro del estado cómo encarar una reforma previsional, una reforma tributaria, etc».

Para que suceda esa discusión profunda de situaciones centrales para el país, Jacobs señaló que se debe involucrar la propia sociedad para dar un debate complejo: «la sociedad civil tiene que tomar un rol preponderante y no señalarlo como lo puedo señalar yo desde mi casa, decir «miren muchachos, hace falta esto, ¿ahora cómo lo vamos a hacer?». El CONICET tiene cientos de miles de personas rentadas trabajando en estos temas. Las universidades públicas, lo mismo en todos sus institutos de investigación. Las universidades privadas que no pagan impuesto a las ganancia también tienen gente. Ahora miran para otro lado, que el gobierno lo haga pero no tiene estado como para respaldarlo y poner capacidad técnica sobre la mesa, y mucho menos capacidad política. A duras penas llegan a juntar un tercio para sacar los vetos».

Entre lo que propone la política y la falta de interés de la sociedad, el combo es terrible porque los temas jamás son tratados con la profundidad necesaria: «Es muy bajo nuestro nivel de la política, por un lado, pero eso ya es un dato para la sociedad civil. La gente tiene un nivel de confusión sobre algunos temas, en particular el previsional, que es escandaloso».

Por otro lado, anticipó que la situación particular de la UBA está siendo analizada por el economista porque tiene un fuerte impacto en todo el sistema universitario: «Estoy por publicar una serie de trabajos sobre el tema de la UBA y lo que implica la extorsión de la UBA sobre las otras 60 universidades. Porque todas las universidades del conurbano, que son como 25, tienen más alumnos que la UBA y la UBA gasta por alumno tres veces más que las universidades del conurbano. La UBA disminuye la cantidad de alumnos y en las universidades del conurbano crece la cantidad de alumnos. Por lo tanto, a presupuestos que no crecen, el gasto por alumno lo aumenta y las universidades del conurbano lo disminuyen. Todo es así. Entonces, cuando vos analizas en conjunto, tenés un problema que no tiene solución. ¿Ahora, cuando lo empezás a desmenuzar, tiene solución?»