Federico Grillo, analista de incendios: “En España son un problema social que requiere un pacto colectivo”

Federico Grillo, analista en incendios, explicó en la 99.9 que la combinación de abandono rural, exceso de vegetación, olas de calor y falta de autoprotección han creado un escenario en el que los fuegos se vuelven imparables y generan un quiebre entre la población y el sistema de emergencias.

El analista en incendios Federico Grillo trazó un panorama crítico sobre la situación que atraviesa España frente a la multiplicación de incendios forestales. “Ahora hay mucho debate, hay muchas voces. En cierta manera cada actor de esta escena tiene su interpretación. Creo que tenemos que alejarnos un poco y entender cómo funcionan las cosas”, señaló en la 99.9.

Grillo explicó que “lo que llamamos hoy primer mundo, el mundo más civilizado, es el que tiene grandes problemas de grandes incendios, hablando ya no de su extensión, sino de incendios imparables, que no existen bomberos, no hay sistemas ni aviones que sean capaces de detenerlo, son fruto de un cambio de uso del territorio”.

En ese sentido recordó que “España hace 50 años era un país muy agrícola, muy ganadero, con un sector primario muy fuerte. Con la apertura de la democracia hay un éxodo de las zonas rurales, un abandono, un tema social. Buscamos una mejor vida, se despoblaron los territorios rurales y eso genera una carga de los bosques. Se van acumulando leñas, troncos, hojarasca, matorrales que arden cada vez más intensos”.

A ese escenario se suman condiciones meteorológicas adversas: “Hemos tenido una primavera muy lluviosa con pastos muy altos que conectan zonas forestales con cultivos abandonados. Si a eso le sumamos olas de calor más intensas y más largas, vemos que lo anómalo es el clima. Con ese cóctel, los incendios se hacen grandes rápidamente porque no los podemos apagar. Y cuando afectan a la población, tenemos un problema social. Hay una ruptura entre el sistema que apaga incendios y la población, porque la gente no se fía y se sienten abandonados. Hay mucho cabreo general”.

El especialista subrayó que la prevención debe comenzar por la autoprotección. “Vivimos en una sociedad donde la culpa siempre es del otro y nosotros somos inocentes. Pero realmente esto no es un problema ni del gobierno ni de los bomberos, es un problema de todos. La solución a las emergencias empieza por la autoprotección. Si yo vivo en un entorno rural, tengo una vivienda en ese entorno, debo asumir que existen riesgos y debo protegerme”, explicó.

Grillo recordó que “un 20% de los incendios que se están originando en la península ibérica son por rayo, o sea que aunque eliminemos la intencionalidad o la negligencia, vamos a tener incendios. Tenemos que convivir con el fuego”. Y ejemplificó: “Muchas de las imágenes que se están viendo son sitios que no han entrado los bomberos porque son indefendibles. Una población que se niega a evacuar obliga a los bomberos a entrar en una situación dramática que no se puede defender. Al final todo el mundo queda con el susto en el cuerpo y con la sensación de que no se ha hecho lo que se debía hacer”.

En ese marco propuso un cambio cultural: “La clave no está en el modelo de extinción tanto como en un pacto social, en el que abordemos todas las problemáticas e intentemos llegar a un punto de entendimiento donde pastores, agricultores, las viviendas, la propiedad, cada uno asuma un papel y sea parte de la solución y no parte del problema”.

La situación de calor extremo también complica la tarea de los equipos de emergencia. “Esa temperatura afecta también al personal de extinción. Ahora mismo las recomendaciones con temperaturas tan altas son protégete del sol, hidrátate, reduce la actividad al mediodía. Y justo en esos momentos, tenemos miles de bomberos trabajando intensamente para intentar sofocar unas llamas. Tenemos que reinventarnos constantemente para buscar puntos, lo que llamamos ventanas de oportunidad, donde el incendio reduce su intensidad y allí podemos actuar. Se hace tremendamente complicado con esta situación de ola de calor”, concluyó.