El concejal de Unión por la Patria en General Pueyrredón, Diego García, cuestionó en la 99.9 duramente la falta de mantenimiento en el Cementerio Parque Municipal. Habló de partidas presupuestarias no ejecutadas, deudas con proveedores, inseguridad, infraestructura destruida y hasta rituales tumberos dentro del predio. “Nunca estuvo tan abandonado como ahora”, afirmó.

El concejal Diego García, de Unión por la Patria, denunció en la 99.9 el deplorable estado en el que se encuentra el Cementerio Parque Municipal de General Pueyrredón y responsabilizó a la actual gestión por la falta de mantenimiento y el incumplimiento de partidas presupuestarias.
“En los últimos días hemos recorrido el Cementerio Parque, hemos visto el estado de abandono, es una queja constante de todos los vecinos de la ciudad. Es una situación indigna, ninguno de los vecinos merece pasar por esto”, sostuvo García. En ese sentido, agregó: “Uno cuando recorre ve abandono, lugares destruidos, filtraciones de palomas encima de los cajones. Literal, lo vi con mis propios ojos: es un horror”.
El edil cuestionó que, a pesar de contar con recursos destinados para mejoras, nada se haya hecho: “Lo peor de todo es que está presupuestado el dinero para poder arreglar el Cementerio Parque. El año pasado había 150 millones en una partida y se gastaron cero pesos. En todo el 2025, hasta ahora, tampoco se ejecutó un centavo. Es abandono y desidia, porque no es que no hay dinero, sino que no se usa”.
García advirtió además que el predio carece de servicios básicos: “Está cortada el agua, no funciona el baño público y hasta la capilla donde la gente podía rezar está abandonada y destruida. Ni siquiera se puede tener un espacio de paz”.
En su recorrida, el concejal relató un episodio alarmante: “Vimos con nuestros propios ojos gente haciendo un ritual tumbero con motos dentro del cementerio, recorriendo encima de las tumbas y haciendo cortes. Es terrible. Ni siquiera se puede estar en un lugar de paz. Todas las paredes están pintadas con inscripciones de fútbol, hay pisadas sobre las tumbas. Nadie controla nada”.
El concejal remarcó que la situación lleva años, pero que alcanzó un nivel sin precedentes: “No quiero puntualizar solo en Montenegro, porque esto viene de antes, pero nunca estuvo tan abandonado como en esta situación. Los propios trabajadores municipales lo dicen”.
También denunció la precariedad en las condiciones laborales de los empleados: “Recorrí las dependencias municipales y es indigno. Hay cables sueltos, riesgo eléctrico, cocinas sin desagües que tiran el agua en tachos, una sola silla que se pasan entre los trabajadores, falta de vestuarios. Es un trabajo insalubre y ni eso se respeta”.
Finalmente, García insistió en la necesidad de una respuesta urgente: “Todos tenemos un pariente o un amigo en ese lugar. No podemos aceptar que se convierta en un sitio inseguro, abandonado, donde cualquiera entra con una moto como si fuera una calle. Si hay partidas presupuestarias que no se ejecutan, el responsable debe dar explicaciones. Es inadmisible que Mar del Plata no pueda tener un cementerio acorde a la dignidad de sus vecinos”.