
El caso de Eliana Bonellis, una joven marplatense de 26 años que necesita un costoso tratamiento oncológico a cuya familia, ante la negativa de la obra social de costearlo, le sugirieron «dormirla para siempre».
Ojalá estuviéramos hablando del hada malvada que, en la fantasía animada llevada al cine, provocó el sueño eterno de la princesa Aurora… pero no. Hablamos de una obra social que se niega a cubrir los gastos de un costoso tratamiento oncológico, y de una familia a la que le sugirieron la alternativa de «dormirla para siempre».
La negativa
A Eliana Bonellis le diagnosticaron a principios de este año un tipo de cáncer que afecta el sistema linfático: se trata del linfoma de Hodgkin, una enfermedad que afecta a parte del sistema inmune. Según relata la familia, en un principio, la obra social Sancor Salud le aprobó el tratamiento, pero los problemas surgieron cuando la joven sufrió una recaída.
El abogado Martín Saggese informó que, por ejemplo, la autorización de una cirugía a la que debían someter a la paciente se autorizó, pero sólo de manera parcial, rechazando gastos que superan los $2.400.000. También, que hubo un retraso en la compra de los medicamentos que se prescriben para el tratamiento de tumores como el que afecta a Eliana, que se encuentran en estado crítico, y que el mismo responde directamente al altísimo costo de los mismos.
A causa de estas acciones por parte de la obra social, la paciente pasó varios días sin medicación, lo que provocó que su cuadro empeorara.
«De un día para otro, nos cortaron todo porque les salía muy cara como afiliada» aseguró en declaraciones mediáticas Gricel Bonellis, la hermana de Eliana. Agregó: «Al no recibir el tratamiento que necesita, los médicos no pueden controlar los síntomas. Nos dicen que la durmamos para siempre».
Ante esta circunstancia, a la familia no le quedó otra alternativa que empezar a hacerse cargo de los gastos, llegando a gastar más de $4.000.000, y hasta se vieron obligados a firmar un pagaré a favor del nosocomio en el que la joven se encuentra internada.
«Estamos atravesando una situación desesperante: mientras el cáncer avanza, la obra social dilata, niega y pone trabas administrativas, incumpliendo con la obligación de garantizar un tratamiento que es urgente y esencial», aseguró Grisel.
Ante las deficiencias en el tratamiento, Eliana sufrió una insuficiencia respiratoria por la cual estuvo 10 días intubada, hasta que «sacarle líquidos de los pulmones ya dejó de ser una opción». Es entonces cuando los médicos sugirieron «dormirla para siempre», ya que se estaban quedando sin otra opción.
El comunicado
Luego de que la familia, desesperada, hizo público el caso, la obra social envió a los medios el siguiente comunicado:
«SANCOR SALUD lamenta la situación de la asociada Eliana Bonellis y se hace eco de las dificultades que ella y su familia se encuentran atravesando».
«En ningún momento se procedió desde la prepaga a la discontinuidad del tratamiento y no se registra a la fecha pendientes de autorizaciones».
«La falta de trazabilidad y alineación temprana con el prestador sobre el circuito correcto de autorización y provisión de medicación oncológica, en un contexto de alta sensibilidad, fue el desencadenante de la percepción de interrupción del tratamiento y exposición mediática».
«Aunque normativamente la obra social actuó dentro de procedimiento, falló la coordinación con el Prestador, con quien estamos en contacto y al aguardo de los nuevos requerimientos para obrar con celeridad».
El amparo
Más allá de las excusas administrativas por parte de la obra social, la realidad es que el tratamiento de Eliana no avanzó de la manera correcta. Ante esta situación, y en representación de la familia, el abogado Martín Sebastián Saggese hizo la presentación de un recurso de amparo ante la justicia, ante la cual el magistrado Santiago Martín, como titular del Juzgado Federal Nº2 de Mar del Plata, se pronunció favorablemente. De esta manera, la obra social deberá cubrir el 100% del tratamiento oncológico de Eliana.
Además, el juez le dio cinco días a la obra social para que explique por qué se había rechazado en su momento el tratamiento. Según el abogado, cada aplicación del tratamiento oncológico prescripto para el caso de Eliana tiene un valor por encima de los $60.000.000. La joven debe someterse al mismo en tres ciclos de medicación que se deben suministrar cada 21 días.
En su decisión, el juez tuvo en cuenta la gravedad del cuadro de salud y el riesgo que hubieran implicado mayores demoras: «En casos como este, esperar al final del juicio podría causar un daño irreparable, ya que está en juego el derecho a la salud y a la vida».
¿Será este el final de la historia?
