Teherán recibe a su negociador en Ginebra como un héroe

Después de cuatro días de reuniones y trabajo en el Hotel Intercontinental de Ginebra, los protagonistas del “plan de acción” pondrán en práctica el acuerdo. Fue suscrito por Irán y el 5+1, grupo formado por los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU: Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China. 

El ministro de Exteriores iraní, Javad Zarif, a su llegada a TeheránEl jefe negociador iraní, Javad Zarif, llegó ayer a Teherán y fue recibido en el aeropuerto como “embajador de la paz”. El Ministro de Exteriores desayunó con la prensa nacional para explicarle el plan que en los próximos seis meses pondrá a prueba la confianza entre Irán y la comunidad internacional. “Esto es Irán, todo el mundo está contento”, fue el titular de portada del diario reformista Etemad. En la misma línea, el periódico también reformista Arman pidió “la medalla de oro” para el jefe del equipo negociador.
El plan de acción no reconoce el derecho de forma explícita, pero tampoco lo niega. Este detalle es la mayor victoria para los iraníes y la mayor preocupación para Israel o Arabia Saudí, que han mostrado su malestar por la apuesta diplomática para resolver las diferencias con una república islámica que, aunque limita su enriquecimiento de uranio al 20%, mantiene intacta su capacidad de controlar el ciclo nuclear.
El primer acto oficial de Zarif en suelo iraní se produjo en una ceremonia de la Organización de la Energía Atómica en Teherán. El diplomático intentó en su discurso convencer a partidarios y detractores de acercamiento a Estados Unidos: “las negociaciones no significan una confianza ciega y haremos todo lo que esté en nuestras manos para alcanzar una solución definitiva, porque no debemos perder esta oportunidad”.
Las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea han logrado que la venta de petróleo pase de 2,5 millones diarios a 1 millón, todo un mazazo para un país cuyas cuentas dependen del crudo. El acuerdo con el 5+1 no levanta el castigo sobre la venta de petróleo, pero permitirá a ciertas aseguradoras volver a trabajar con la república islámica, lo que le podría ayudar a incrementar la exportación a países como India en unos 300.000 barriles diarios.
La Unión Europea ha comenzado las gestiones para “implementar la primera fase del plan”, adelantó el portavoz comunitario de Exteriores, Michael Mann. Aseguró que se fijó para “diciembre o enero, depende de cuánto tiempo lleve el proceso legislativo”, la fecha para el levantamiento de los castigos acordados para los próximos seis meses.