El economista Alejandro Caldarelli, integrante de la Consultora “Economía y Regiones”, se refirió esta mañana en la 99.9 a la profunda crisis que tienen las cuentas provinciales cuando aún no se abrió el período de paritarias. “Cada punto de aumento en la masa salarial, le costará a la provincia 2.200 millones”, anticipó.
Las proyecciones económicas para el 2014 no son buenas, y no se puede encontrar un analista en la materia que sea optimista en cuanto a la evolución de las finanzas provinciales durante este año.
Esta mañana brindó en la 99.9, brindó su opinión Alejandro Caldarelli, de la Consultora “Economía y Regiones”. En principio, afirmó que “el 2014 será un año muy difícil. El año pasado se había iniciado mal y gracias a contener el aumento salarial y la presión tributaria, se pudo acomodar todo. Este año no se puede aumentar más la presión tributaria, y aparecen los conflictos salariales que entorpecerán el desarrollo fiscal”.
Se necesitará mucho dinero para equilibrar las cuentas de cada provincia y del país en general. “Todas las provincias presentaron déficit en sus presupuestos para el 2014, y rondaba los 8.000 millones de pesos. En nuestro cálculo, con un 25% promedio de aumento salarial y un 30% de crecimiento de recursos, el déficit llegaba a 17 mil millones. Necesitarían 37 mil millones para financiarse en conjunto”, aseguró el analista.
Puntualizando sobre la carencia en la provincia de Buenos Aires, Caldarelli remarcó: “significarán 15 mil millones de necesidad de financiamiento, sin contar los aumentos y protestas que se vienen ahora. Cada punto de aumento en la masa salarial, le costará a la provincia 2.200 millones. Lo más complicado de todo es cómo lo financiarán”. Aunque destacó que por estos días “se está conversando para diferir el pago de la deuda con el Gobierno nacional por el programa de desendeudamiento, son como 4.300 millones”.
El problema es que incluso acudiendo a los recursos de la Nación, las cuentas dan en rojo: “la Nación tiene como prestamista de última instancia al Banco Central y el Anses. Incluso con esos recursos tendrá un déficit de 2 puntos del PBI. Esto no indica que la Nación se quede con fondos de la provincia”.
Para tratar de salvaguardar el equilibrio económico se tomaron medidas que terminaron desvirtuando aún más la situación. Caldarelli explicó que “con el Fondo del Conurbano Bonaerense ya hay seis provincias que reciben más dinero que la propia Buenos Aires. El Gobernador tendría que hacer más esfuerzos para que esto no suceda, porque le afecta directamente a las finanzas públicas”.
Todo esto se plantea en un escenario donde, además, todavía no han comenzado las discusiones salariales. Al no haber números oficiales sobre los que apoyarse, las paritarias pueden terminar con números más grandes de lo esperado: “no tenemos estadísticas confiables y entonces no se sabe cuál es la inflación. Cualquier gremio, cuando se sienta a negociar, puede decir que la inflación es de 38% por ejemplo, no hay manera de medirlo”.