El consumo de marihuana también es malo para el corazón

Cuando se habla de enemigos del corazón, suelen salir a la palestra el sedentarismo, la obesidad, la comida basura o el tabaco. Sin embargo, hay otros factores que también hay que tener en cuenta por su capacidad para destapar la caja de los truenos en el sistema cardiovascular. Las drogas son uno de ellos.

marihuanaNumerosos estudios han relacionado el consumo de cocaína con la aparición de problemas cardiacos e, incluso, con el desarrollo de serios daños estructurales en el corazón. Pero esta sustancia ilegal no es la única que ataca de forma silenciosa al motor del organismo. También el cannabis puede ejercer un efecto dañino.

Lo confirma un estudio que publica esta semana la revista Journal of the American Heart Association y que da cuenta de las complicaciones cardiovasculares que se asocian al consumo de marihuana.

Dirigida por Émilie Jouanjus, del Hospital Universitario de Toulouse (Francia), la investigación hizo un seguimiento a todos los casos que se registraron entre 2006 y 2010 en la Red Francesa de Vigilancia de Adicciones, una iniciativa que cuantifica y evalúa los problemas sanitarios relacionados con las drogas.

Sus datos mostraron que un 2% de todas las complicaciones relacionadas con la marihuana tenían que ver con el sistema cardiovascular. Entre los casos notificados, había fundamentalmente ataques al corazón, aunque también se registraron trastornos en las arterias que riegan el cerebro o las extremidades.

“El cannabis puede desencadenar problemas cardiovasculares y así debe ser visto por especialistas sanitarios y usuarios, que a menudo admiten los peligros de drogas como la cocaína y las anfetaminas, pero minimizan los del cannabis”, señalan los investigadores en la revista médica.

Estos científicos hallaron 35 casos graves de problemas cardiovasculares relacionados con la marihuana (la mayoría en hombres menores de 35 años), pero creen que podría haber muchísimos más. “Hasta el 95% de los casos se queda sin notificar en los registros”, subrayan. Además, recuerdan que, según sus datos, la tendencia es creciente y la gravedad muy alta -hasta el 25% de los casos terminaron con el fallecimiento del paciente-.

“Dado que el cannabis se percibe como libre de daños y que hay un debate sobre la legalización de su uso, la información sobre sus peligros debería diseminarse ampliamente. Los médicos deberían ser conscientes de que el cannabis puede ser un potencial factor desencadenante de complicaciones cardiovasculares en gente joven”, subrayan.

Coincide con este punto de vista José Ramón González-Juanatey, presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), quien recuerda que la relación entre cannabis y corazón lleva un tiempo valorándose.

“No está claro cuál es el mecanismo por el que la marihuana afecta al corazón, pero ya se había asociado su uso con riesgo de infarto o de muerte súbita”, explica. En ese sentido, el especialista reclama investigaciones al respecto y un registro que permita analizar la relación en nuestro país.

En cualquier caso, recuerda a los pacientes con problemas de corazón -como personas con aterosclerosis o hipertensión- que el consumo de marihuana podría ser especialmente perjudicial en sus circunstancias.

En un editorial que acompaña al trabajo en la revista médica, varios cardiólogos estadounidenses señalan que estos datos ponen de manifiesto que aunque está demostrado que la marihuana tiene un beneficio terapéutico para pacientes que sufren enfermedades crónicas y/o debilitantes, como la esclerosis múltiple, “también hay evidencias clínicas sobre su potencial para provocar serios riesgos cardiovsculares”, por lo que “es responsabilidad de la comunidad médica determinar la seguridad de la droga” ante el debate de su legalización para fines lúdicos.