Gustavo Brambati, especialista del Centro de Experimentación y Seguridad Vial (CESVI), dialogó con la 99.9 sobre los nuevos camiones bitrenes, brindando detalles sobre su funcionamiento. “El beneficio que tiene el camión bitren es transportar, con menos viajes, más carga”, destacó.
La aparición en escena de los camiones bitrenes, anunciados en Cadena Nacional, han traído una serie de interrogantes sobre su funcionamiento. Para aclarar esas inquietudes, esta mañana habló con la 99.9 el especialista en Seguridad Vial Gustavo Brambati, del Centro de Experimentación y Seguridad Vial (CESVI). En principio, señaló que “un bitren es un vehículo más largo que un camión convencional, que tiene de 18 a 20 metros, pero este nuevo modelo mide de 28 a 30. Tiene una distribución por eje más equitativa de la carga, lo que al asfalto lo complicaría menos. El beneficio que tiene el camión bitren es transportar, con menos viajes, más carga”.
Claro que, además, de una serie de beneficios, el nuevo vehículo tiene sus problemas. “La dificultad del bitren tiene que ver con la longitud y el sobrepaso en la ruta. Vemos que aumenta el riesgo de sobrepaso, pero no en una autopista, por ejemplo. Hay que estudiar el tema de los puentes, porque la carga estática es distinta, y cuando el camión se para en algún puente hay que ver si permite la carga estática”.
Para que los bitrenes comiencen a funcionar en todo el país, es preciso cumplir con un paso previo: “hay que modificar la Ley Nacional de Tránsito, porque no autoriza el exceso de longitud y de carga. Eso está estipulado y habría que modificarla. San Luis generó legislación propia para permitir que circulen”.
Además, Brambati destacó la tecnología aplicada a este camión: “el bitren está equipado con frenos ABS, no se puede hablar de los vetustos camiones que uno ve todos los días en las rutas argentinas”.
Mientras el proyecto sigue su curso, lo cierto es que muchas rutas argentinas no han mejorado: “hice un relevamiento en estos días de las rutas del país. Hoy, el 90% de las rutas son convencionales, donde conviven los dos sentidos de circulación. Solamente el 7% de las rutas son autopistas o semi-autopistas, y un 10% son caminos de tierra. Esto en el interior se sufre, y mucho”.
Más allá de la nueva maquinaria, Brambati pidió que se actualicen los métodos de Vialidad en rutas para salvar vidas: “hoy tenemos rutas con baches que se sostienen en el tiempo, ya cambiaron las velocidades de las rutas y se necesita otra calidad para garantizar la seguridad de un recorrido”.