El Papa Francisco visitará Israel, Palestina y Jordania entre el 24 y el 26 del presente mes de mayo.
El Vaticano y representantes de la Iglesia católica en Jerusalén han expresado su preocupación al gobierno israelí por la ola de actos vandálicos contra varios centros cristianos en Israel, sobre todo en Jerusalén. El Papa Francisco visitará Jordania, Palestina e Israel entre el 24 y el 26 de mayo.
Este tipo de ataques, llamados “Tag Mejir” (etiqueta de precio), son cometidos por extremistas nacionalistas judíos que rechazan la presencia de musulmanes o cristianos en Israel o Cisjordania, y sufren un repunte desde el inicio de las negociaciones de paz entre Israel y los palestinos hace nueve meses.
Aunque las negociaciones se rompieron el mes pasado, los extremistas han continuado con los actos vandálicos entre los que se incluyen graffitis racistas en mezquitas o monasterios, ruedas de coches pinchadas o profanación de tumbas. Ahora, la Iglesia Católica se muestra consternada no solo porque los ataques aumentaron en cantidad sino, también, porque temen que la próxima visita del Papa Francisco a Tierra Santa pueda verse empañada por los extremistas.
El Vaticano ha pedido al gobierno israelí que se muestre más firme ante este tipo de actos criminales y proteja los lugares santos y centros cristianos. La orden de los Franciscanos en Tierra Santa, que es custodia de los lugares santos en Jerusalén, aseguró además que el miedo a los extremistas ante la visita papal está erizando todavía más las difíciles relaciones interreligiosas en la aborratada Ciudad Vieja de Jerusalén.
“Hace poco, la policía pidió la retirada de un póster de bienvenida al Papa a la entrada de la Ciudad Vieja, cerca de la Puerta de Yafa“, comentó a ABC Artemio Vítores, vicario de la Custodia de Tierra Santa de los Franciscanos. “Según la polícia, el póster había sido colgado sin la autorización pertinente del ayuntamiento, pero como tantos otros carteles en la ciudad. Lo que pasó probablemente es que como el póster estaba colocado en una vía donde pasan muchos judíos camino al Muro de las Lamentaciones, quizá pensaron que podría provocar los ánimos de los judíos más extremistas“, comentó Vítores.
El último incidente de este tipo contra propiedad cristiana ocurrió a principios de mayo, cuando el centro cristiano de Notre Dame, cerca de Jerusalén Este, amaneció con pintadas que leían «Muerte a los árabes y a los cristianos y a todos aquéllos que odian Israel». Pero hay muchos otros ataques de este tipo que ni siquiera aparecen en los medios y que se han convertido en el pan de cada día para los cristianos locales.
“A nosotros, aquí, los Franciscanos nos han tirado piedras muchas veces contra el tejado, e incluso contra los propios frailes“, comentó Vítores. “Y no es que este tipo de ataques sean nuevos, es que ahora aparecen más en los medios y antes no lo hacían. Ahora tienen más visibilidad, y por eso se ha aprovechado para exigir al gobierno israelí que haga algo para evitar que un pequeño grupo de extremistas empañe la visita papal y las relaciones del Vaticano con Israel“, agregó.
La Ciudad Vieja, sellada
La policía israelí y el Shin Bet, el servicio de seguridad general de Israel, van a extremar las precauciones durante la visita papal, ante el temor de que los extremistas judíos intenten algún tipo de ataque nacionalista a gran escala aprovechando la cobertura mediática del Papa Francisco. La Ciudad Vieja de Jerusalén, donde el Pontífice acudirá a rezar al Cenáculo, estará prácticamente sellada durante dos días, mientras que los servicios de seguridad vigilarán estrechamente los lugares santos.
El primer ministro Benjamín Netanyahu ha comentado que el gobierno tendrá más mano dura contra los actos vandálicos de corte racista y nacionalista en Israel y Cisjordania.