El culto ya cuenta con una tercera parte de su clero ocupado por mujeres, que son ordenadas desde 1994.
El Sínodo General de la Iglesia de Inglaterra votó ayer en la ciudad inglesa de York a favor de que las mujeres puedan ser obispo. El consenso llega dos años después de que fracasara por escasos sugragios un intento similar en ese sentido, por lo que el flamante éxito de quienes impulsaban esta modificación fue celebrado ampliamente.
La moción obtuvo la mayoría de dos tercios necesarios entre obispos, clérigos y laicos, los tres sectores que integran el gremio rector de la Iglesia Anglicana. El resultado fue de 152 votos a favor, 45 en contra y cinco abstenciones. Se prevé que los primeros nombramientos puedan efectuarse en 2015.
El histórico resultado de la votación fue acogido en la sala con vítores y algunos aplausos entre los congregados; pese a que el arzobispo de York, John Sentamu, había pedido a los miembros del Sínodo que reaccionaran con “sensibilidad y contención”.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, durante el debate previo intentó calmar a los tradicionalistas. “Espero y confío en que esta votación salga adelante y me alegraré de ello”, dijo. Y agregó: “pero también me alegra que hayamos prometido buscar la prosperidad de todos aquellos que disienten en la Iglesia”.
“Si no supiese que esto iba a ser así, no apoyaría esta legislación. No se aparta a miembros de la familia o se les dificulta estar en casa, se les quiere y se busca su bienestar, aun cuando se disienta“, expuso el arzobispo.
En noviembre de 2012 se había tratado una iniciativa similar para que las mujeres pudiesen ejercer el obispado, pero fracasó por escasos votos. Tras esa derrota, incluso el primer ministro David Cameron se había sumado a las críticas a la Iglesia, a la que pidió actualizarse. Antes de la votación de ayer, Cameron reiteró su apoyo a la iniciativa: “estoy a favor de las obispas. Creo que el arzobispo Welby ha mostrado un gran liderazgo en este tema y le deseo lo mejor”.
Luego de la votación de ayer, la propuesta irá al comité eclesiástico del Parlamento, pasará por ambas cámaras y luego se precisará el apoyo de la Casa Real.
El Sínodo General se reunirá el 17 de noviembre para dar su aprobación final, por lo que Inglaterra podría contar con su primera mujer obispa en la Navidad de este año.
Lo cierto es que este proyecto avanza en el marco de una Iglesia Anglicana que ya cuenta con una tercera parte de su clero ocupado por mujeres. Esta institución comenzó a ordenar en el sacerdocio a mujeres en 1994.
El año pasado, Pat Storey se convirtió en la primera mujer obispo en Reino Unido e Irlanda cuando la Iglesia irlandesa la designó titular de Meath y Kildare.
La Iglesia Anglicana tiene la mayor denominación cristiana en Gran Bretaña y forma parte de la Comunión Anglicana, con presencia en más de 160 países.
Esta Iglesia comprende la República de Irlanda e Irlanda del Norte, que forma parte de Reino Unido. En Gales y Escocia la Iglesia también ha aprobado en 2013 una legislación que permite nombrar mujeres obispo, aunque no ha nombrado a ninguna.