Presupuesto municipal |
Hay sorpresa dentro de los bloques por el impactante desmanejo a la hora de tratar el presupuesto municipal para el 2015, y un gran desconcierto por los enormes aumentos que prevé en las tasas, con el fin de justificar una chorrera de gastos, que a esta altura es imparable. El concejal José Cano –UCR- dijo: “el presupuesto se ha convertido en una autorización para gastar que se le otorga a un mono con navaja”. Y, casi.
Junto con la discusión presupuestaria, que se impone de manera autoritaria, con documentación incompleta y escasos elementos para evaluar la necesidad de los gastos, se trata la Ordenanza Fiscal Impositiva, que determinará un incremento importante en la presión tributaria que se ejerce sobre los ciudadanos. Si bien a nadie escapa que la inflación ha sido importante en el año que termina, los aumentos parecen exagerados, ya que alcanzarían un porcentaje mucho mayor del que se ha comunicado a los medios. Las tasas para habilitación, por ejemplo, llegaría al doble de los valores actualmente previstos, y otros impuestos se elevarán en un 40%.
Según afirma la concejal Cristina Coria, del bloque de la UCR, más allá de la inflación, “el problema es que esta administración no ha hecho nada para reducir el gasto; entonces recurre a la salida más fácil, que es trasladar el aumento de costos a las tasas, lo que implica un castigo a las actividades productivas”. Según explica, el Ejecutivo introdujo en la nueva norma una herramienta que permite reevaluar el valor fiscal de las propiedades de los marplatenses a valores de 2013, lo cual podría implicar un nuevo incremento en los impuestos en el segundo semestre del año, ya que en la actualidad se utiliza una valuación del 2007. Aumentarán además las tasas de Seguridad e Higiene y las alícuotas, que pasarán a pagar un 0,8%.
“Hay una enorme voracidad fiscal, porque ellos no paran de gastar”, dijo la edil, a la vez que detalló que no se trata únicamente del sueldo de cada nuevo funcionario que ellos deciden incorporar, sino también de toda la estructura que se arma a su alrededor para justificar su presencia dentro del organigrama. A esto se suman los enormes gastos en publicidad, y lo que han dado en llamar el festival de horas extras. “Hay un mal manejo administrativo que hace que a la municipalidad todo le cueste el doble”, dijo Coria.
Pero a pesar de todo lo expuesto, se ve venir que Acción Marplatense ya tiene los votos que necesita para aprobar más o menos lo que le ha dado la gana, ya que los concejales de FPV acompañan la movida sin que se note demasiado. Según indica Coria, “algunos bloques aplican un maquillaje para justificar el acompañamiento al nuevo presupuesto”, a lo que se suma un “dejar hacer” del Frente Renovador, conducta que Cano, por su parte, calificó de “comportamiento errático”, para ese sector político.
La concejal estableció una analogía oportuna entre el gasto municipal y la administración propia de un hogar, y dijo: “cuando en una casa el dinero es escaso, uno recorta los gastos innecesarios para asegurar el abastecimiento de lo central”. “Contrariamente”, afirma, “ellos no hacen ni un gesto para recortar lo superfluo. Lo redoblan, y recortan lo central: educación o pago a proveedores, que ya no quieren ni presupuestar a la comuna porque saben que no van a cobrar”.
No alcanza
Claro que quienes tienen años en la política, recuerdan la reacción que Gustavo Pulti concejal tenía cada vez que algún colega planteaba la posibilidad del aumento de las tasas: inmediatamente lo consideraba como un incapaz.
En aquel momento, el entonces joven concejal disidente veía con malos ojos la nueva incorporación de personal, aun cuando la planta funcional era de 6.000 empleados, contra los casi 11.000 que tiene hoy, según la evaluación que está realizando José Cano.
El mismo concejal Cano, en entrevista para la emisora 99.9, indicó que lo que están haciendo le parece escandaloso, porque los aumentos no tienen proporción, en un proceso que catalogó de gran mentira: “por el mismo servicio, en algunos casos se está recaudando a través de tres tasas”. Cano considera que uno de los rubros más desmesurados sería el aumento en las habilitaciones. Piensa que, contrariamente, debería estimularse la habilitación de comercios, con el fin de que se active la instalación de emprendimientos, se contrate mano de obra, y luego se paguen también las tasas correspondientes. Dice: “el presupuesto está subestimado y el cálculo de los recursos está sobreestimado. No cumple con la regla básica del presupuesto, que es que todos los gastos estén considerados”.
Hoy el déficit municipal supera los 411 millones de pesos, pero “Pulti se siente tan dueño de la municipalidad que ni siquiera ensaya un gesto de transparencia”, cierra el concejal.
Y dice además que, a su juicio, no hay en la administración actual ningún criterio de planificación, ni de previsión sobre partidas para el mantenimiento de bienes que la municipalidad ya ha comprado o construido. Pone el ejemplo de los hidroelevadores que se utilizan para las luminarias de servicio público: “se trata de un equipamiento que costó millones y que está en franco deterioro por culpa de la indolencia de los gobernantes”.
Precisamente sobre el tema de los hidroelevadores, hubo una nota presentada el 19 de diciembre pasado ante el Ejecutivo por el Sindicato de Trabajadores Municipales, firmada por su secretario general, Antonio Gilardi, y el secretario de Acción Social y Obras, Daniel A. Zacarías. Los hechos denunciados allí son de una gravedad extrema, en referencia a los riesgos que se corren en cuanto a la seguridad de los trabajadores municipales, por la falta de mantenimiento preventivo y correctivo de esos equipos.
Por lo expuesto, los trabajadores solicitaron al Departamento Ejecutivo que informe, a través del Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado Público, cuál es la razón de la falta de mantenimiento de los equipos hidroelevadores, así como cuáles fueron los dos graves accidentes producidos en los últimos 60 días. Asimismo, se deberá informar cómo se va a seguir, es decir cuál es el plan de acción a desarrollar para subsanar los problemas denunciados por la entidad gremial.
Sin plata
Pero la administración comunal no ha tenido un buen año. Como se recordará, pesa sobre los responsables la denuncia por malversación, que terminó con la situación deficitaria, y afectó los fondos necesarios y previstos para el mantenimiento de los edificios escolares. En ese momento, todo terminó con el parche que el Intendente aplicó con dinero proveniente de la caja de Obras Sanitarias, que debía ser devuelto.
Pero la falta de previsión llega a todos los extremos. Al respecto, el Tribunal de Cuentas de la provincia de Buenos Aires había realizado las correspondientes especificaciones, que obviamente no fueron atendidas, porque el intendente parece no rendir cuentas a nadie.
Ahora, la resolución 0010/14 del Honorable Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires del 4 de diciembre de 2014, referida a la utilización de los recursos del Fondo Federal Educativo, dice: “Deberán ser utilizados por los municipios en concordancia con los objetivos estrictamente educativos del artículo 2° de la Ley 26.075. Asimismo deberán ser destinados exclusivamente a establecimientos incorporados al Sistema Educativo Nacional. Los municipios podrán utilizar los recursos del Fondo de Financiamiento Educativo, pero esa utilización está clara y taxativamente establecida y debe ser construcción y/o mantenimiento de infraestructura escolar de gestión estatal en cualquiera de sus niveles; generación de programas de capacitación y apoyo pedagógico destinados al mejoramiento de la calidad educativa y evitar la deserción escolar, adquisición y/o mantenimiento de equipamiento escolar y cualquier otra finalidad estrictamente educativa”.
Sin embargo, el Municipio de General Pueyrredon no ha cumplido con lo dispuesto por la Ley que estableció el Fondo Federal Educativo en los últimos años, y el proyecto de Presupuesto para el ejercicio 2015, en tratamiento en este Honorable Concejo Deliberante desde el pasado 9 de diciembre de 2014, tampoco lo prevé.
Devolver la plata del fondo no es el único problema que Pulti ignora como si no estuviera. Parece que le debe a la Obra Asistencial de los Agentes Municipales, OAM, la friolera de $ 2.638.849, por aportes patronales y personales que corresponden a los meses de agosto, septiembre y octubre del corriente año. Por esa razón, el 1 de diciembre último, la Obra Asistencial de los Agentes Municipales dirigió una nota al Intendente reclamando la deuda de aportes, y solicitando su regularización en el término de 48 horas. El problema no es nuevo; lo mismo le había sucedido con los aportes de los meses de mitad de año 2014, cuando se registró un retraso similar.
Recientemente, el bloque de Agrupación Atlántica convocó a una conferencia de prensa donde se ofrecerían pruebas y documentación sobre el supuesto descubierto bancario en que habría incurrido el Municipio de General Pueyrredón entre el 7 y el 10 de noviembre último. Sólo eso nos faltaba.
Es decir que no pega una. Al barco le entra agua por todas partes, y Pulti no quiere que se le ensucien las jinetas. Sigue pretendiendo dirigir la batuta de una discusión sobre presupuesto, sobre la cual tiene en realidad poco que decir: todo se reduce a conseguir la plata para apagar el incendio. Y después, cuando cesen las llamas con la plata de la gente, que alguien le saque los fósforos para que no haga más desastres. Porque, como dice Cano, es un mono con navaja.