“No cuenta con los equipamientos necesarios”, indicó Marcelo Güemes director del nosocomio donde sucedió el hecho. La nena nació prematura y sufrió lesiones en las piernas y en las manos.
El director del Hospital Jorge Ahuad de la localidad pampeana 25 de Mayo, Marcelo Güemes, donde una beba que nació prematura sufrió quemaduras de tercer grado con un caloventor, dijo hoy que se trató de “un accidente” y justificó el hecho al afirmar que “se hace lo que se puede” con los recursos con que cuentan.
La beba nació prematura, de 7 meses, el domingo en el centro de salud público, y las quemaduras en las manos y piernas fueron advertidas por médicos de la Clínica Pasteur de la ciudad de Neuquén, donde fue derivada junto a su madre, a quien el hospital no había informado el hecho.
“El hospital no tiene los equipamientos necesarios para ciertas complejidades”, expresó Güemes, y manifestó que las lesiones se produjeron “mientras la doctora canalizaba e intubaba” a la beba durante tareas de “reanimación” tras el parto.
El médico sostuvo que esa asistencia se realizó “en un lugar pequeño”, por lo que “tenían el caloventor a 50 centímetros del chico y se quemó, lamentablemente”.
“No es una quemadura porque pusimos el caloventor al lado, sino a 50 centímetros”, explicó, y consideró que “lamentablemente no se dieron cuenta”.
El director del hospital afirmó que “nadie trató de ocultar nada, ninguna información. Lamentablemente ocurrió un accidente que no estaba previsto, que fue la lesión y una quemadura en el miembro inferior derecho en la piernita y en el pie”.
La abuela de la bebé Eva Cerna aseguró que los padres de la niña iniciarán acciones legales por mala praxis contra el hospital público pampeano.