Miguel Barreiro es un vecino de Balcarce que viajaba hacia Mar del Plata cuando fue testigo del choque donde “Lalo” Ramos impactó contra un Corsa donde viajaba una familia. Incluso fue quien le hizo la reanimación a Thiago: “las butacas se desprendieron y por eso aplastaron al nene”, recordó.
El choque de Eduardo “Lalo” Ramos que pudo haberle costado la vida a Thiago, ha tenido distintas versiones mediáticas. Pero ninguna se acerca tanto al momento del impacto como la que ha brindado esta mañana en la 99.9 Miguel Barreiro, vecino de Balcarce que vivió en carne propia la situación e incluso asistió al ex piloto de TC y reanimó al niño.
“El accidente ocurrió a unos 60 metros de donde íbamos nosotros. Mis hermanos y yo fuimos los primeros en llegar”, señaló inicialmente. Luego relató como vivió el momento del choque: “el Sr. Lalo Ramos nos pasó a una gran velocidad e impactó de lleno en el Chevrolet Corsa donde iba la familia. Mi hermano tuvo la lucidez de frenar sin que nadie los impactara de atrás, viendo como se despedazaba el auto que empezó a girar en el asfalto. Los pedazos de plástico pegaban en el parabrisas de nuestro auto”.
La primera reacción que tuvo fue ir hacia donde estaba el auto que protagonizó el impacto sin saber siquiera que tipo de vehículo era, ni mucho menos quien estaba dentro: “nos bajamos con mi hermano y les pedí que agarren el matafuegos porque en uno de los autos salía humo. Cuando llego cerca me doy cuenta que es un Mercedes y le puse la mano en el pecho y en la cabeza al hombre que estaba adentro preguntándole si estaba bien. Me contestó “no me toqués que yo estoy bien” y le dije que se estaba prendiendo fuego el auto, que se baje”. Recién con el arribo de uno de sus hermanos, se dio cuenta de quien tenía delante: “mi hermano llegó y empezó a preguntarle “¿estás bien Lalo?” y ahí le pregunté quién era. Lo bajé del auto y me seguía diciendo que no lo tocara, lo dejé en la zanja y le dije a mi hermano que vayamos para el otro auto porque estaba loco”.
Ahí fue donde se dirigió hacia el Corsa donde estaba la familia tratando de salir: “ya había gente en el lugar. En ese momento, veo que sacan a alguien del auto de espaldas y me doy cuenta que era una criatura. La dejaron tirada en el suelo, había una mujer de rodillas saliendo del auto y gritando “mataron a mi hijo”. Ahí se me nubló todo, no sabía qué hacer. Escuchaba gritos por todos lados, era un caos. Me di cuenta de la magnitud del accidente”; indicó casi quebrado por aquél recuerdo Miguel.
Fue entonces cuando decidió actuar para tratar de salvarle la vida a Thiago: “vi que el nene estaba todo ensangrentado. Me hinqué de rodillas, le iba a hacer la reanimación cardíaca pero escuché que alguien decía que lo habían sacado de entre los asientos. Entonces decidí no hacerlo porque podía estar lastimado o quebrado. Le hice respiración boca a boca varias veces hasta que escupió una bocanada de sangre y me di cuenta que estaba vivo”, agregó al borde del llanto.
A partir de ahí no sabe mucho más que lo que se dio a conocer porque entregó al nene a los brazos de su padre y luego se mantuvo en contacto con la familia para saber si evolucionaba bien. Mientras viajaba para ver a su madre internada, vivió un momento que quedará grabado en sus retinas: “las butacas se desprendieron y por eso aplastaron al nene”, recordó.
Enojado por la reacción de “Lalo” Ramos se lo notaba hasta con cierto desprecio en su tono de voz. En aquél momento, también uno de sus hermanos evitó que golpearan al ex piloto: “si no fuera por uno de mis hermanos a Lalo Ramos lo linchan porque pararon algunos que le querían pegar porque los había pasado a una velocidad impresionante”, finalizó.