Esta mañana, en la 99.9 se expusieron dos versiones completamente opuestas de un caso sucedido en diciembre del año pasado donde perdió la vida Tomás Pérez, un joven de 17 años. Según su familia, todavía no saben porque un policía le disparó y la Dra. Andrea Gómez, fiscal del caso, asegura que circulaban en una moto robada y querían sustraerle la suya al efectivo.
Las versiones son realmente apuestas. El hecho sucedió el 19 de diciembre de 2014 y hoy la familia del fallecido realiza una marcha para reclamar lo que ellos entienden como justicia. Yesica Maldonado es quien se ha movilizado en las redes sociales convocando a dicho evento y habló en la 99.9 sobre el hecho donde perdió la vida Tomás Pérez y fue herido su hermano Leandro, supuestamente a manos de un efectivo policial en lo que ellos indican que fue gatillo fácil: “los chicos iban a la playa y de ahí al centro. En Mendoza y Falucho se cruzan con Santiago Pérez y no sabemos bien lo que pasó. Él le dispara por la espalda a unos metros, a Tomás le da dos tiros en la espalda y a Leandro uno en la pierna. Estuvieron tirados 40 minutos, los mismos policías hacían tardar la ambulancia”, aseguró.
La versión inicial indicaba un tiroteo donde se habrían producido esas heridas, pero Yesica señaló que “en la escena, supuestamente, encontraron un .38 que tenían los chicos y el policía le disparó con una .40 no reglamentaria. Supuestamente fue un tiroteo pero no había vainas del .38. Las pericias dieron que el policía fue el único que efectuó los 7 disparos”. Ante la consulta por antecedentes de cualquiera de los dos, agregó que “Tomás trabajaba con el abuelo en un aserradero y de vez en cuando con el papá en el puerto. Hasta el 2013 estudió y en 2014 no fue al colegio, hizo hasta noveno año”.
El único testigo en el que confían es Leandro que a causa del hecho ha quedado con secuelas psicológicas y no quiere hablar: “no tenemos idea de porque el policía disparó. Si leemos la causa los testigos dicen todos los días algo distinto. Leandro no quiere hablar al respecto y no le queremos insistir porque él no está bien, le mataron al hermano al lado. Tiene ataques de nervios y dice que lo va a matar”, puntualizó Yesica.
El detonante llegó cuando acusó a la fiscal interviniente en el caso, la Dra Andrea Gómez: “el día que mi mamá le fue a reclamar el cuerpo de Tomás, le dijo que si ella hubiera sido el policía no le daba el tiro en la panza sino en el medio de la frente porque defiende a la comunidad y no a los chorros. Según ella, fueron a robar”, concluyó.
Andrea Gómez: “Venían en una moto robada y le quisieron su vehículo al policía”
La Dra. Andrea Gómez reclamó su derecho a réplica en la 99.9 y la tuvo, explicando la versión que figura en la causa y que difiere prácticamente en todo, respecto de lo que contó Yesica. “Lo que pasó es que es que tanto Leandro como Tomás Pérez venían en una moto robada, con pedido de secuestro. Cuando el policía sale de la planta verificadora en Paso y Tucumán, es abordado por estas dos personas que intentan sustraerle la moto. Le pusieron el revolver en la panza y la espalda”, dijo. Luego abundó: “en la zona de Gascón y Mendoza, más o menos, se desata una balacera. El revolver que fue secuestrado en el contenedor que estaba en la ruta de escape de los delincuentes, se verificó que no fue percutado. No menos de 5 testigos presenciales que estaban de casualidad por la zona, aseguraron lo mismo”, destacó.
Sobre las acusaciones que tuvo la media hermana de la víctima para con ella, Gómez se defendió: “en cuanto a las demoras que dice la familia, entendí que no era aplicable la ley porque estábamos en un caso de legítima defensa de un ciudadano que sale de franco de servicio. Cuando vino a increparme la madre, le respondí que defendía a la comunidad en general y no a la policía”.
Por último, destacó que no sólo los hermanos tenían una causa previa, sino también la madre: “había verificado que Leandro y Tomás tenían una causa de igual modus operandi donde habían sustraído una moto de igual cilindrada. La madre de Tomás Pérez tiene una condena de ejecución condicional por dos años debido a la comercialización de estupefacientes”, concluyó.