Elección crucial I. La que se vivió por la conducción del Colegio de Magistrados en General Pueyrredon. Ganó la lista que lleva a la presidencia por dos años al juez Rodrigo Cataldo, por un resultado de 136 votos contra 121 de la lista que proponía para el cargo al ciudadano uruguayo Luis Diego Benvenuto Vignola. Resultado crucial si los hay, porque detrás de Vignola se alinea La Cámpora y todo el esquema de Justicia Legítima, manejados por el recientemente desprocesado Marcelo Madina y Juan Tapia.
Elección crucial II. Al cierre de la justa electoral, Madina y Tapia se mostraban exultantes, estado de ánimo que fue mutando a medida que avanzaba el conteo de votos, que terminó revelando la derrota. En ese momento, Tapia comenzó a quejarse por una volanteada que había inundado el palacio ese día, donde se exponían las características de la auditoría a la que la Corte somete a Benvenuto Vignola por acciones desdorosas en contra de una funcionaria judicial integrante del staff de su juzgado.
De campañas y aparecidos I. La campaña del diario La Capital sobre Carlos Fernando Arroyollega a puntos increíbles. Por caso, que Florencio replique la metodología de acoso y derribo que arrojó sobre Mario Russak con el lanzamiento del diario “La voz de la costa”. Contaba para ello con un elenco de periodistas escribas que tenían como objetivo demonizar al intendente electo de le época.
De campañas y aparecidos II. El medio de marras desapareció a horas del pedido de licencia de Russak. Los escribas quedaron en la vía y sin espacio en los medios de Florencio Aldrey por mucho tiempo. Como burra que va de vuelta al trigo, los escribas de los noventa en contra de Russak retornan en la campaña brutal que llevan hoy en contra de Arroyo. Para entender sobre el valor de estas acciones, vale recordar qué paso con Russak.
De campañas y aparecidos III. “La voz de la costa” cerró un día después de que Russak pidió licencia, el 1 de septiembre de 1995. Todo salió mal para los que pujaban por sacar a Russak del sillón principal de la Municipalidad de General Pueyrredon. Russak reocupó el cargo y finalizó su mandato, entregando el sillón comunal a Blas Aurelio Primo Aprile, quien, pese a gozar de la estima y acompañamiento del multimedios, renunció sin finalizar su mandato. Aprile tuvo un solo medio que le cuestionaba sus políticas públicas: Noticias & Protagonistas.