El estudio de 1,3 millones de suecos refuta el concepto de ‘fofisano’.
La idea de que se puede estar obeso pero sano ha sido refutada según datos de un estudio sueco realizado en más de un millón de hombres y que se ha publicado en International Journal of Epidemiology. El trabajo señala que los efectos protectores de estar muy en forma se reducen en las personas obesas.
Los efectos perjudiciales de no estar en forma y tener una baja capacidad aeróbica están bien documentados, aunque en poblaciones ancianas. La novedad de este estudio es que investiga el vínculo directo entre buena condición aeróbica y salud en personas más jóvenes.
Los investigadores siguieron a 1.317.713 hombres durante una media de 29 años, con el objetivo de determinar la asociación entre capacidad aeróbica y muerte años después y cómo la obesidad afecta los resultados. La capacidad aeróbica de los participantes se midió pidiéndoles que pedalearan hasta que tuvieran que parar por cansancio.
El resultado más destacado del estudio es que los hombres más en forma tuvieron un riesgo 48% menor de muerte por cualquier caso comparado que aquellos en menos forma. “Nuestra mayor dificultad en la investigación es que, probablemente, no sabemos si aquellos que estaban en forma a los 18 años seguirán en forma 25 años después”, reconoce por correo electrónico Peter Nordstrom, del departamento de Salud Pública y Medicina Clínica de la Universidad de Umea (Suecia) y coautor del trabajo.
En su opinión, un dato sorprendente de su investigación es la asociación entre baja forma y muerte por traumatismo. “Sólo podemos especular, pero los factores genéticos podrían influenciar en esta asociación, ya que la capacidad aeróbica está muy influenciada por la genética. Tendemos a creer que si entrenamos y nos ponemos en forma se produce menos enfermedad cardiovascular. Y, en este caso, debemos recordar que los datos que hemos manejado son observacionales, que nunca prueban una relación causa-efecto”, detalla.
Los investigadores suecos también evaluaron el concepto de que “está bien estar obeso pero en forma”. Los hombres de peso normal, independientemente de su condición física, tenían un menor riesgo de muerte comparados con las personas obesas con mayor capacidad aeróbica.
El estudio ha puesto de manifiesto también que el efecto beneficioso de una alta capacidad aeróbica se reduce con una mayor obesidad y no hay ningún efecto significativos en aquellos con obesidad extrema.
Nordstrom reconoce la limitación de su investigación al incluir únicamente a hombres. “Por supuesto nos hubiera encantado incluir a mujeres, el problema es que usamos la base de datos de reclutamiento del ejército entre 1969 y 1996. Y, como a las mujeres no se las llamaba a filas, no hemos tenido acceso a sus datos. Creo además que no hay ninguna base de datos de mujeres de este tipo en ningún país”, concluye.