El titular de Sanidad de Fronteras en Mar del Plata, Nazareno Di Giovanni, habló en la 99.9 sobre la delicada situación que atraviesan porque están casi a un año de que el gobierno nacional no les envíe el dinero para pagar los impuestos. Ya les han cortado el agua y la luz: “los empleados hemos pagado desde marzo del año pasado, poniendo más de 15.000 pesos”.
La secretaría local de la Sanidad de Fronteras, está atravesando una situación muy complicada desde hace un año. El gobierno nacional no les envía los fondos para los gastos corrientes y desde entonces, decidieron pagar los propios empleados por los servicios mínimos para el funcionamiento.
El titular de esta entidad, el Dr. Nazareno Di Giovanni, habló en la 99.9 y remarcó que “funcionamos en el corazón del puerto, la Avenida de los Pescadores al 600. El rol es evitar que entre por carretera, mar o aire, cualquier tipo de enfermedad traído por las embarcaciones o las personas. Es un control de frontera que existe en todos los puertos del mundo y junto con Aduana y Migraciones, forman la famosa triada de control”.
La decisión de ubicarse en el puerto de la ciudad tiene su explicación lógica: “Mar del Plata tiene su relevancia más importante en la actividad portuaria, el 90% de nuestra actividad de control se basa en lo que ingresa por el Mar. Dependemos directamente del Ministerio de Salud de la Nación”.
Los servicios de agua y luz son los primeros que les han cortado en esta nueva etapa y por eso, Di Giovanni aclaró que “es una situación nueva de un problema viejo. La tesorería del estado nacional en marzo del año pasado mandó el último fondo fijo que mandan cada 3 meses para que nos hagamos cargo de los servicios para el funcionamiento normal de la unidad”.
Como necesitaban contar con esos servicios para seguir trabajando, tomaron una decisión: “ante las primeras boletas sin poder pagarlas, decidimos entre todos los empleados pagarlas ante la promesa de mandar los fondos más adelante. Desde entonces, no se ha enviado nada. Los empleados han puesto más de 15.000 pesos y decidimos no poner más dinero. El primer servicio que se cortó fue el agua”.
A pesar de la voluntad que surgió cuando se dio a conocer la situación, el titular de Sanidad de Fronteras, destacó que se debe resolver el problema por las vías correspondientes: “Obras Sanitarias me llamó ofreciéndome la reconexión del servicio, pero es un acto de voluntarismo, no la solución definitiva. Quien tiene que pagar, que pague y se haga cargo. Ahora tenemos un corte de luz y estamos en la misma situación”. Incluso agregó que “ayer tuvimos una reunión y decidimos los empleados pagar esta boleta para no quedarnos sin servicio”.
Esta nueva resolución ayuda a descomprimir la situación, teniendo en cuenta la coyuntura. “Sabemos que es un cambio de gobierno, una transición e incluso no tenemos designada la nueva autoridad de Sanidad de Frontera a nivel nacional que es a quien debemos reclamarle. A partir del martes, estaremos vacunando con normalidad”, concluyó.